El Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) es el principal documento rector del urbanismo local, regulando los usos del suelo y todas las especificidades técnicas que se requieren a la hora de poder llevar adelante proyectos e iniciativas de tipo urbano.
Se trata de un documento vivo que requiere de modificaciones para ir adaptando el marco regulatorio a las nuevas necesidades, tal y como se hace de manera habitual en cualquier Concello del territorio.
El concejal de Urbanismo, Manuel Santos, explica que en este momento se están tramitando dos modificaciones puntuales promovidas por el Concello y que son de "gran interés".
Una de ellas tiene que ver con la mejora del Plan Básico de Usos Municipales, con dos objetivos: "por un lado, esta mejora permitirá que actualicemos en el PGOM las normativas estatales y autonómicas que fueron cambiando en los últimos años y, por otro, podremos regular mejor cuestiones relacionadas con nuevas modalidades de turismo sostenible".
Tal y como expuso Santos, Marín está siendo un municipio "muy atractivo" para iniciativas turísticas respetuosas con el medio ambiente "que encontraron en nuestra villa lo que ya sabemos que tenemos: un entorno inigualable, un terreno lleno de posibilidades y unas conexiones buenísimas, lo que nos convenirte en un punto estratégico para la expansión turística que están experimentando las Rías Baixas".
"Por eso", continúa el concejal, "tenemos que revisar bien la normativa que tenemos obsoleta y no perder oportunidades muy interesantes para que la pulsión turística de Marín siga creciendo, tal y como ya lo está haciendo en los últimos años, muy centrada en un turismo activo y rural que requiere modelos de alojamiento diferentes, con encanto y enmarcados en un estilo de viajero que busca más allá de la pernocta habitual".
REMODELACIÓN DE MÉNDEZ NÚÑEZ
Otra de las modificaciones puntuales que está en marcha es la que afecta la zona de actuación anexa a Méndez Núñez, una zona de la que pendía un proceso judicial, que se resolvió con la sentencia del TSXG, que mantuvo la clasificación de este área como suelo urbano no consolidado, tal y como ya comunicó el Concello desde el año 2022 públicamente.
De esta forma, se plantea que toda esa manzana pase a contar con varias secciones: Un área dotacional privada, correspondiente con el espacio que ocupa el CPR La Inmaculada, por otra parte una equipación pública que podrá ocupar algo más de 670 metros cuadrados. Y también contempla una zona residencial, en la que se podrá construir un edificio de 59 viviendas, con una extensa zona verde en su alrededor. Y por último, la apertura del vial que conectará la Calle Estrada con Fondo do Saco, que supondrá la creación de 27 nuevas plazas de estacionamiento.
Santos explica que "nos gustaría que esta modificación fuera más rápida en su tramitación, pero llevamos casi dos años pendientes de la autorización de Costas y de que se resuelva una alegación pendiente". Una vez estas dos cuestiones estén desencalladas, podrá aprobarse provisionalmente, para después pasar por las manos de la Xunta de Galicia y finalizar el proceso con la aprobación definitiva.
SEI SAN NARCISO
Santos aclara, por otro lado, que existe una modificación promovida por una entidad particular, en este caso el SEI San Narciso, que ya fue aprobada inicialmente en el Pleno de la Corporación y que ahora está pendiente de la revisión técnica por parte de la Xunta de Galicia.
El objetivo de esta modificación es una mejora de las instalaciones deportivas del centro educativo, a través de un cambio de usos del suelo. Precisamente, por ser coincidente con la modificación impulsada por el Concello sobre el cambio de usos, los servicios técnicos están valorando la posibilidad de tramitar conjuntamente ambas.
Santos recuerda que "cualquier entidad particular, tal y como podría hacer cualquier persona o empresa, puede promover modificaciones en el planeamiento. Es algo común en el día a día de la gestión urbanística y que nosotros, como Concello, tenemos que darle tramitación".