"No son cuatro locas desesperadas, son madres que están luchando por sus hijos e hijas"

Pontevedra
05 de abril 2024
Actualizada: 30 de septiembre

Varias decenas de personas respondieron este viernes a la llamada del Colectivo Feminista de Pontevedra para concentrarse en la avenida de Vigo y denunciar casos en los que los juzgados apelan al conocido como Síndrome de Alienación Parental (SAP). Denuncian el "falso SAP" y la "violencia institucional" que consideran que supone 

Concentración feminista delante del Punto de Encuentro Familiar en la avenida de Vigo
Concentración feminista delante del Punto de Encuentro Familiar en la avenida de Vigo / Mónica Patxot

Un grupo de varias decenas de personas respondió este viernes a la llamada del Colectivo Feminista de Pontevedra para concentrarse en la avenida de Vigo, ante el edificio de la Consellería de Sanidade, que acoge el Punto de Encuentro Familiar, y denunciar los últimos casos de los que han tenido conocimiento en los que los juzgados apelan al conocido como Síndrome de Alienación Parental (SAP).

Esta concentración busca apoyar a madres que en estos momentos tienen procesos judiciales en marcha en los que se apela a ese SAP, entre ellas, dos de los partidos judiciales de Cambados y Marín que se han denunciado en las últimas semanas. 

Con esta protesta, quieren "que quede claro que no son cuatro madres locas desesperadas". Así, María Jesús Cuéllar, del Colectivo Feminista de Pontevedra, denuncia que las instituciones "quiere que parezca que son cuatro madres que están locas", pero ellas quieren insistir en que "son madres luchadoras que están luchando por sus hijos e hijas a las que se les está causando violencia desde las instrucciones".

Las personas que apoyaron la concentración se acompañaron de carteles denunciando el "falso SAP" y la "violencia institucional" que consideran que supone y, en nombre del colectivo feminista, Catarina Cosque, señaló que los juzgados están alegando este síndrome a pesar de que la Organización Mundial de la Salud "dijo que no existía" y "Europa ya hace bastante tiempo le dijo a España que era algo inexistente y que no podían utilizarlo en los juzgados para quitar los niños a las madres". 

María Jesús Cuéllar habla de "mala praxis" y de que los juzgados están "causando violencia en la madre, pero, sobre todo, en esos niños". Así, por ejemplo, señala que, en el caso de los juzgados de Marín, una niña de 10 años está ahora en un centro de menores por orden judicial, alejada de su red familiar, en el marco de un proceso para determinar la custodia. 

Al respecto, esta integrante del colectivo feminista recuerda que "un centro de menores no es un parque de juegos para niños, no es un local idóneo para que estén niños, están allí sin su madre y sin su padre". 

Desde el colectivo explican que, tras el caso de Cambados, el primero en conocerse, han llegado a su conocimiento varios más. Tenían ya "seis o siete" con madres que se pusieron en contacto con ellos y saben de otros "diez o más". Además, este mismo viernes, durante la concentración, una madre aprovechó para dar a conocer uno más

Sobre estos casos de los que tienen conocimiento, explican que la situación más habitual con la que se encuentra es la de "padres ausentes que, de repente, se acuerdan de que tienen hijos, denuncian para tener su custodia y los niños no quieren estar con ellos porque no los conocen de nada".

Ese sería "el mejor de los casos", pues también tienen casos en los que existe un abuso sexual o situaciones de violencia.

Como resultado de esto, se encuentran con que las familias acuden al Punto de Encuentro Familiar y los niños reaccionan "con ataques de ansiedad, con dolores de barriga, no quieren ver a los padres". En los casos que conocen, las instituciones dicen que "estos niños no quieren ver a los padres porque la madre malmete contra ellos", pero este colectivo feminista asegura que "eso no es cierto", sino que lo que sucede es que "la madre es el único vínculo que tienen esas criaturas".