La Asociación Cultural de Cobres organiza para este sábado 9 de marzo a Morada, "unha cita para a familia do Entroido". Se trata de una fiesta pensada para compensar a las personas que sostienen a fiestas de las Madamas e Galáns.
Durante toda esta jornada reciben el cariño de la ciudadanía a través de una comida de confraternidad.
Según informaron desde la organización, a día de hoy más de 220 personas se inscribieron ya para participar en esta "xornada de recoñecemento a quenes levaron a ilusión do Entroido de Cobres barrio a barrio".
Algunos de los integrantes de esta voluminosa comitiva de Madamas, Galáns, bailarines y músicos acumulan años de experiencia que, sin embargo, no evitan que las cuatro jornadas de Entroido que los mantienen literalmente en pie durante más de 8 horas diarias situándolos al borde del agotamento físico. Además suman todos ellos muchísimas horas de ensayo a lo largodel año para que el Entroido de Cobres se mantenga fiel a una tradición que arrancó hace más de cuatro décadas.
Este sábado día 9 la Morada se desarrollará cumpliendo con la tradición. Una carpa instalada en Riomaior dará cobijo a las personas para disfrutar de una comida popular.
Lidia Peleteiro, directiva de la asociación cultural Cobres, recuerda que la Morada "facíase orixinalmente cos alimentos que as familias entregaban ao Entroido cando ían pedir". Asegura que incluso "había quen cedía unha vaca para facer estas comidas". Luego solo asistían al almorzar quienes iban a bailar o tocar. Con el paso de los años a organización optó por contratar a un cocinero que se encarga de los fogones mientras que las familias de Galáns y Madamas hacían las veces de auxiliares para que los protagonistas del Entroido disfrutasen del día.
"Agora a Morada está aberta ás familias e á veciñanza que dalgún xeito colabora na conservación desta festa que é unha sinal de identidade para Vilaboa e especialmente para Cobres; a laboriosa elaboración dos gorros, a indumentaria de cada madama e de cada galán, os complementos pero tamén os traslados e os gastos que supón manter a actividade que desenvolvemos todo o ano sería impensable sen a implicación e as renuncias das familias das madamas e galáns".