Al impacto y repercusiones que conlleva la presencia de un cáncer en la propia persona enferma y su entorno próximo, hay que añadir ahora las repercusiones de la COVID-19. Bien lo saben los voluntarios y personal de la Asociación Española Contra el Cáncer como lo es Carmen García Hijano, coordinadora de voluntariado y psicóloga de la AECC en Pontevedra, con la que charlamos.