Silvia Aldao ha tenido este lunes su primera oportunidad laboral. Con 39 años, y usuaria de la asociación Juan XXIII desde hace largo tiempo, esta incursión en el mercado de trabajo le llegó en la papelería Carlin de Pontevedra de la mano del proyecto 'Merca có 23', que busca demostrar las capacidades laborales de las personas con discapacidad intelectual.
Esta pontevedresa las demostró, dejando un buen sabor do boca tanto para sí misma como para su 'empleador' durante un día, Pablo Conde, co propietario del negocio. Durante toda la mañana, realizó tareas de reposición de productos y apoyó en el trabajo habitual de la tienda y todo lo hizo "estupendamente".
Para Silvia ha sido una oportunidad "muy importante". Así lo explicó durante la mañana mientras reponía material de papelería en las estanterías del local de Carlin en Cruz Roja y contaba que era la primera vez que probaba una experiencia laboral fuera de la asociación, en un establecimiento abierto al público.
Descubrió que le gustaba mucho. Para este puesto se requieren varias capacidades que ella ya sabía que tenía y le generó gran satisfacción ver cómo las podía aplicar en un trabajo, entre ellas, su gusto por el orden. "Me encanta colocar la cosas bien, me encanta todo colocado bien", explica, en alusión a que en su día a día ya es "muy ordenada".
Además, este trabajo le ha permitido relacionarse. "Me gusta hablar con la gente y decirle dónde están las cosas", indica. Y, en general, "aprendí mucho y bien" y está "muy contenta" de poder probar en un comercio aunque solo haya sido por una mañana.
Sí ha trabajado antes, pero en proyectos internos de la asociación, ayudando a los demás en el centro de día, realizando tareas de encuadernación, haciendo cajas y álbumes de fotos o elaborando fregonas, "un poco de todo". Esto le ha permitido dar un paso más al salir al mercado laboral convencional, pues trabajar es "importante".
Que Silvia Aldao confirmó sus capacidades lo confirma Pablo Conde, que considera que este proyecto es muy importante porque demuestra que "por supuesto" que una persona con discapacidad intelectual también puede trabajar. Ella lo hizo "fenomenal".
En Carlin ya han colaborado en el pasado con la asociación Juan XXIII y han querido sumarse a este proyecto 'Merca có 23', con el que se busca concienciar a la sociedad sobre las capacidades de las personas con discapacidad intelectual y mejorar así su calidad de vida personal y familiar, al tiempo que le dan confianza en sus capacidades para ser tenidas en cuenta en el mundo laboral.
Este proyecto de sensibilización ayuda a cambiar la visión del empleo de las personas con discapacidad, pues durante seis meses de este año 2023, y coincidiendo con los días 23 de cada mes, personas con discapacidad participan activamente en el desempeño de tareas laborales junto con las personas trabajadoras de comercios de Pontevedra, Moaña, Bueu y Cangas.