La Xunta reconoce una chapuza en las obras de un colegio de Bueu
Por Redacción
Las obras de reparación de la cubierta del CEIP A Pedra de Bueu tuvieron una "mala ejecución". Así lo reconoció la Xunta de Galicia este jueves. Esta reacción se produce justo el mismo día en el que saiu a la luz que la asociación de padres del centro pidió a los alumnos que habían llevado cubos para sembrar de ellos el gimnasio en protesta por las goteras que afectan a las instalaciones deportivas.
La Asociación de Nais e Pais (ANPA) explicó que entre los objetivos de esta protesta estaba el de meter presion a la Consellería de Educación para que subsanasen las deficiencias. El mismo día en que se conoció, la Xunta emitió un comunicado en el que anuncia que las "obras de mejora del techo del gimnasio del CEIP A Pedra de Bueu se iniciarán de manera inmediata tras detectar una mala ejecución de los trabajos por parte de la empresa adjudicataria".
La Jefatura Territorial de Cultura y Educación reconoce que la "cubierta presenta un problema arrastrado de las piezas del atornillado, que, al carecer de goma de caucho, es decir, de protección, filtra el agua de la lluvia al interior del gimnasio".
La reparación de la cubierta es una actuación realizada en 2011, pero, según denuncian desde el ANPA del centro, se paralizaron. La Xunta explica que tuvo conocimiento de que la obra tenía deficiencias a través de la propia dirección del centro.
El coste de las nuevas obras "será afrontado a través de la fianza aportada por la adjudicataria"
De hecho, las obras inminentes que se van a ealizar se harán conforme a un informe solicitado por el jefe territorial de Cultura y Educación en Pontevedra, César Pérez Ares, después de visitar hace unos días el centro y detectar la entrada de agua en el gimnasio.
"Acudimos hasta el centro invitados por la dirección, que nos pidió que comprobásemos la situación y que motivó que solicitase finalmente un informe técnico que evaluase la causa del problema", explicó.
"Como son muchas las piezas que hay que cambiar, la mejor solución, según los técnicos, es levantar la chapa exterior y sustituirla, algo que se realizará en los próximos días", indicó Pérez Ares.
Al detectar una mala ejecución de los trabajos por parte de la empresa que llevó a cabo la obra, y que en estos momentos se encuentra en suspensión de pagos, "el coste será afrontado a través de la fianza aportada por la adjudicataria".