Los integrantes de la recién creada plataforma Pontevedra de Noite han comparecido este viernes públicamente para explicar los motivos de esta unión, que no es otro que cooperar juntos para evitar la desaparición del ocio nocturno en la Boa Vila.
La agrupación está formada por una decena de empresarios que representan a los cerca veinte locales de ocio nocturno que todavía perviven en la ciudad. "La mitad o menos que hace veinte años", recuerdan con nostalgia.
Los empresarios alertan de un problema que atañe a toda la ciudad y demandan el amparo del Concello ante lo que consideran "una persecución sobre las licencias del ocio nocturno".
El principal problema que denuncian es la imposibilidad de adecuar sus locales a los requerimientos del Plan Especial de Protección y Reforma Interior y Conservación Acústica (Peprica), una normativa aprobada en el 2003, que impide realizar cualquier tipo de obra en los pubs para solucionar cualquier tipo de deficiencia que puedan presentar estos bajos que "son locales antiguos, pequeños, que han pasado por muchos dueños y en los que realizar algunas obras es dificil".
De los veinte locales que mantienen licencia en Pontevedra, uno ya la ha perdido y ha tenido que cerrar por la imposibilidad de solucionar un problema urbanístico. Otras cinco se encuentran en revisión y además hay numerosos locales sin actividad. "Es el 25 % del total", alertan.
"Se basan en una ley obsoleta de hace 30 años, no todos los locales reúnen la infraestructura para adaptarse a la normativa del Peprica. Nosotros no nos negamos a adaptarnos, pero son intransigentes, queremos que sean flexibles para que podamos adaptar nuestros locales", es la petición que quieren trasladara todos los partidos tan pronto como pasen las elecciones porque "porque este es un problema de todos"
Ponen como ejemplo de la persecución a la que están sometidos al uso de toldos en la zona vieja. "Están prohibidos, pero todos los locales tienen toldo. Pero solo han ordenado quitarlo y cerrar a uno de ocio nocturno", ilustran.
"Pedimos protección, no queremos que haya una libertad de licencias pero sí una protección de las que hay actualmente, porque la realidad es que está habiendo un aumento de control y de exigencias, además de un trato preferente a otros locales que no son del ocio nocturno", se quejan.
"Es un acoso y derribo, nos sentimos perseguidos y parece que lo que quieren es quitar la noche. Quieren destruir este sector en base a una normativa de hace 20 años. Intentamos adaptarnos al máximo posible al Peprica pero son intransigentes porque no todos los locales tienen una estructura para adaptarse al 100% a esta normativa. Hay cosas que son inviables y lo único que queremos es que tengan mano flexible para que podamos adaptar nuestros establecimientos", insisten.
En representación del ocio nocturno, formaron parte de la rueda de prensa de esta mañana de viernes los propietarios de Bazaar, Patrimonio, Aranda, Bangkok, Cielo, Ítaca, Artik, Lelé de Noite, Moncloa y Banana, aunque también forman parte de la plataforma propietarios de otros locales como La Pomada o Sala Karma.