El Banco de Alimentos en su delegación de Pontevedra hace balance de los productos básicos que fueron repartidos durante el año 2022 y señala que se entregaron cerca de 390.000 kilos de comida a través de su actividad.
Según señala esta fundación, a lo largo de ese año se mejoró la cesta básica. Adquirieron y añadieron a sus depósitos alimentos más saludables con el objetivo de dar respuesta a las demandas nutricionales actuales, que establecen una dieta equilibrada.
También indican que, gracias al trabajo diario de lucha contra el malgasto y a través de la colaboración con diversas cadenas de alimentación, en 2022 se evitó que acabaran desperdiciados 96.598 kilos de comida, que sería destruida.
Desde Banco de Alimentos explican que antes estos restos eran destinados a comedores sociales, pero en los últimos años, cada vez son más las ONG que solicitan productos en perfecto estado de consumo que requieren una rápida clasificación y entrega. Con esta práctica, indican desde la Fundación, se recuperan estos productos frescos y evitar que terminen en la basura. También se influye positivamente en el medio ambiente, evitando más CO2 a la atmósfera.
El Banco de Alimentos lleva 27 años realizando actividades en Vigo, mientras que en Pontevedra comenzaron hace nueve años. Desde esta delegación se atiende a alrededor de 5.000 personas en situaciones vulnerables, con la colaboración de cuarenta colectivos sociales.