La ocupación "no es un problema" en Pontevedra con casos "que no son significativos"
Por Redacción
Las autoridades pontevedresas no están preocupadas por el fenómeno de las ocupaciones. "No es un problema en nuestra provincia", asegura la subdelegada del Gobierno, Maica Larriba, a tenor de los datos registrados en los primeros ocho meses del año.
Este tipo de casos bajaron un 10% con respecto a 2021 en toda la provincia de Pontevedra, porcentaje que en la ciudad de Vigo se eleva hasta un 47% menos.
Las ocupaciones, defendió Larriba, "no son significativas" en Pontevedra y entre las que se producen, siete de cada diez son en viviendas abandonadas o propiedades vacías pertenecientes a bancos o grandes propietarios.
En la mayoría de los casos estas viviendas son ocupadas por personas en riesgo de exclusión social y "clara vulnerabilidad", según ha detallado la subdelegada del Gobierno.
Estos datos fueron analizados, junto con el resto de las cifras de delincuencia e infracciones penitenciarias registradas en la provincia durante los meses de julio y agosto, en la Junta Provincial de Seguridad, en la que participaron los principales mandos policiales de la provincia.
Aunque las autoridades apuntan que el índice de criminalidad "es bueno en líneas generales", se está registrando un ligero aumento de los delitos leves, tales como los hurtos, los daños o las lesiones que están, en muchas ocasiones, "ligado al ocio nocturno".
Durante el verano, a pesar de ello, se produjo un descenso de los robos con fuerza, tanto en viviendas como en establecimientos, y de los delitos contra la libertad sexual.
En el caso de la ciudad de Pontevedra, el descenso en estos hechos delictivos fue superior al 90 %, pero se incrementaron los hurtos. En total, se produjeron 38 durante los meses de julio y agosto, lo que supone un ligero aumento con respecto al 2019 -año que se toma como referencia-.
En Vilagarcía no se produjo ningún delito contra la libertad sexual durante los meses de julio y agosto de este año. Asimismo, Maica Larriba valoró positivamente el descenso, de un 50 %, de los delitos de sustracción de vehículos y en vehículos, así como de los robos en viviendas. De nuevo, esta ciudad registró un leve incremento de los delitos leves de hurto, lesiones y daños vinculados estrechamente al ocio nocturno.
Por último, en Marín, aunque descendieron a la mitad los robos con fuerza en establecimientos, se registró un importante aumento de los robos con fuerza en viviendas, pasando de un robo registrado en los meses de julio y agosto de 2019 a los 4 registrados este año. Y aunque también se incrementan los daños leves, la subdelegada destacó que esta es la única ciudad en la que descienden los hurtos, en un 30%, y las lesiones, manteniéndose a un nivel similar al registrado en el 2019.
Dos ámbitos en los que se intensificó el trabajo policial fueron los ciberdelitos, que suponen ya una de cada tres infracciones procesadas por la Guardia Civil; y en los incendios, al registrarse 392 fuegos que quemaron 2.267 hectáreas. Se investigaron a nueve personas y detuvieron a una de ellas.
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