El vicepresidente de la Diputación de Pontevedra, César Mosquera, impartió este miércoles un seminario en Logroño en el que aseguró que hay que eliminar clichés y mitos falsos sobre el tráfico urbano para poder actuar con determinación en el diseño de las ciudades y recuperar el espacio público para las personas.
'Elementos básicos del comportamiento del tráfico urbano’, era el título de este seminario en el que participó personal político y técnico del Ayuntamiento de Logroño, de los colegios de Ingeniería y de Arquitectura de La Rioja, también la directora de la DGT, del departamento de Carreteras del Gobierno de La Rioja, y de la Plataforma de Movilidad de la comunidad.
En su intervención el nacionalista subrayó que, en muchas ocasiones, cuando se proponen modificaciones en la movilidad de las ciudades se parte de premisas erróneas que pueden pervertir la toma de decisiones políticas idóneas, coartando cambios que beneficiarían al conjunto del vecindario. En concreto, Mosquera hizo referencia a la necesidad de conocer el concepto de "desaparición del tráfico" cuando se limita o corta el paso de vehículos en una calle.
Explicó que cuándo se restringe el tráfico en una vía siempre surge la pregunta de hacia donde se desvía ese tráfico, cuáles son las vías alternativas por las que pasa la circulación, cuando en la realidad, explicó, "el flujo de vehículos no se desvía, sino que en la mayor parte, deja de existir".
El vicepresidente subrayó que hay datos corroborados de que en ciertas zonas el tráfico que existe "es de agitación", el de los coches que dan vueltas buscando una plaza de aparcamiento, que puede llegar hasta el 90%, y de otra buena parte es tráfico no necesario de personas que podrían hacer su desplazamiento caminando.
Para Mosquera, ordenar esos tráficos innecesarios y de agitación supone "un favor a la persona que está enfadándose dando vueltas buscando la plaza imposible, y un favor a la ciudad porque la tranquiliza y se gana un espacio público". Explicó que en Pontevedra en el conjunto de la villa se rebajó el tráfico más del 50%, en el primer anillo dos tercios, y un 90% en la parte histórica: "hubo un efecto absolutamente lógico a pesar de parecer contradictorio. A pesar de que parece lógico dar mayor capacidad a una vía para mejorar el tráfico, al reducirlo funciona muchísimo mejor. No hay retenciones", subrayó.
Antes de iniciar el seminario a comitiva pontevedresa fue recibida por el alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza, y la concejala de Promoción Económica y Turismo, Esmeralda Campos, y el concejal de Movilidad Jaime Caballero.
Hermoso manifestó que el trabajo hecho en Pontevedra y por la Deputación de Pontevedra en la provincia en los últimos años es un "referente" para el trabajo en Logroño.