El San Benito vuelve a los salones del Lérez con su romería más esperada
Por Redacción & Mónica Patxot
Tras días de un calor asfixiante, la climatología ha sido benévola con San Benito. El paréntesis que, meteorológicamente hablando, hemos tenido este lunes ha permitido que cientos de pontevedreses pudiesen gozar del regreso de la romería popular en los salones del Lérez.
Desde primera hora de la mañana, fueron muchos los que se acercaron para disfrutar de esta jornada festiva que, tal y como estaba previsto, arrancó con el pasacalles de Os Alegres desde el Concello hasta la playa fluvial y con la actuación de los Gaiteiros das Rías Baixas.
Los asistentes dieron además buena cuenta de los sabrosos mejillones que se sirvieron, de manera totalmente gratuita, en la mejillonada popular organizada por el Concello.
En la comida, que se celebró en el ámbito de la playa fluvial, también se sirvieron otros manjares como empanada, churrasco, sardinas o pulpo á feira.
Ya por la tarde, el grupo Pandereteiras do Val de Quireza y Os Alegres mantuvieron el buen ambiente en las inmediaciones de la playa fluvial del Lérez, haciendo tiempo para la verbena con la orquesta Ritmo Joven en el atrio del monasterio de Lérez.
Fue en este segundo ámbito en donde se concentraron las celebraciones religiosas de la romería en honor a San Benito, al que numerosos devotos renovaron su devoción con la esperanza de curar algún mal, la "especialidad" de este santo.
Las primeras misas de la mañana, que se celebraron a partir de las ocho de la mañana, ya hacían presagiar que habría una asistencia masiva, ya que todas ellas lograron llenar la iglesia, obligando incluso a acortar los tiempos de espera entre una liturgia y la siguiente.
En las inmediaciones del monasterio, como es habitual, también se instalaron los tradicionales puestos de rosquillas o los puntos en donde hacerse con los exvotos para ofrecer al santo.