En un plazo de ocho meses. Esa es la fecha en la que la Deputación espera tener finalizada la construcción de su nuevo parque de maquinaria, que abandona la Xunqueira de Alba para instalarse en el polígono industrial de Barro. Allí ocupará dos parcelas de 8.763 metros cuadrados en total.
La presidenta provincial, Carmela Silva, puso este lunes la primera piedra de este nuevo equipamiento, al lado de las escavadoras, acompañada del vicepresidente, César Mosquera, el alcalde de Barro, Xosé Manuel Abraldes, y responsables de la compañía Tragsa.
El nuevo parque de maquinaria, valorado en 2,3 millones de euros, serán unas instalaciones "modernas, funcionales y adaptadas a la normativa laboral", según destacaron los responsables del gobierno provincial.
Tendrá 3.000 metros cuadrados construidos distribuidos en dos grandes volúmenes.
El edificio principal, con unos 1.500 metros cuadrados y 6 metros de altura, tiene en la nave-taller, que ocupa 800 metros, la pieza central. Otros 130 metros son para almacenes de las brigadas.
El espacio administrativo, donde se sitúan despachos y oficinas y que ofrecerá la fachada principal, tendrá otros 600 metros repartidos en dos plantas.
Finalmente, en una esquina de la parcela se situará la nave del almacén principal de la Deputación, con 450 metros cuadrados construidos.
Además, a lo largo de todo el perímetro de la parcela se dispondrán las marquesinas para maquinaria y vehículos, ocupando 1.000 metros cuadrados.
Todo ello, "esponjado" con zonas verdes y un acceso peatonal desde la entrada.
Carmela Silva destacó que será un espacio "moi digno" y que tendrá una situación "idónea e ben comunicada" que permitirá además recuperar "o que nunca debeu ser maltratado" como es la Xunqueira de Alba, que será objeto de una actuación para su recuperación natural.
Tanto la presidenta como César Mosquera hicieron un llamamiento para la Xunta siga este ejemplo y también retire de la 'xunqueira' pontevedresa sus instalaciones.
"Que toda unha Consellería de Medio Ambiente diga que non ten previsto, que non lle sae das narices, saír dun dominio público marítimo-terrestre que aínda é recuperable francamente é absolutamente impresentable", ha censurado el vicepresidente provincial.
Una vez inaugurado el parque de maquinaria en Barro, la Deputación impulsará la segunda fase de este proyecto con la demolición de las edificaciones e instalaciones del viejo parque y de la imprenta y la recuperación ambiental de todo este espacio, generando un bosque con árboles autóctonos.
Esta segunda fase contará con un presupuesto de otros 1.335.000 euros y un plazo de ejecución de unos cinco meses, por lo que a comienzos de 2023 la ciudad de Pontevedra ganará un nuevo pulmón verde de unos 17.000 metros cuadrados.
El calendario de obras prevé que una vez retirados todos los escombros y descontaminado el terreno se efectuará un tratamiento natural dando cumplimiento a la hoja de ruta marcada por el plan gestión del ENIL de la Xunqueira de Alba, donde hace ya más de una década se proyectó el progresivo desmantelamiento de las concesiones públicas allí ubicadas.
El proyecto de la Deputación opta por la plantación de robles, alcornoques, fresnos negros, abeleiras, 'mimbreiras', madroños, sauces, acebos y laureles, entre otras especies.
Será por lo tanto un nuevo bosque mixto de especies endémicas, generando una conectividad vertical y horizontal con vocación de cobijar a la fauna.
El vecindario contará también con más espacio para el ocio, pues se incluye un nuevo sendero peatonal, con mobiliario urbano e iluminación respetuosa con el entorno, enlazando los futuros itinerarios con el existente en el curso bajo del río Rons.