El de este lunes ha sido un pleno 'caliente' para el gobierno municipal. Hasta el pleno de la corporación municipal se han acercado tres colectivos que denuncian la "falta de diálogo" del gobierno: vecinos de Monte Porreiro, funcionarios del Concello y bomberos.
Todos ellos se han concentrado ante las puertas del Teatro Principal para hacer visibles -y audibles- sus reivindicaciones y, a continuación, asistieron a la sesión desde el patio de butacas, con frecuentes aplausos a las intervenciones de la oposición y abucheos al ejecutivo municipal.
Bajo el lema "más negociación y menos imposición", los delegados de la junta de personal del Concello han denunciado la "forma de facer as cousas" del ejecutivo municipal que, según el portavoz sindical Héctor Santaló, está basada en adoptar decisiones de manera unilateral.
Santaló ha lamentado la conducta "contumaz e reiterada" del gobierno de "non ter en conta" a las agrupaciones sociales y, en nombre de todo el colectivo de funcionarios, ha defendido la "emenda á totalidade" que los sindicatos impulsan la gestión municipal del personal.
A este respecto, censuran la revisión de cuestiones "que sempre eran pacíficas" como la concesión de los permisos, la vulneración "sistemática" del convenio y la negativa a negociar uno nuevo o que se haya dejado "no caixón" un acuerdo que incluía mejoras salariales y la revisión de la función de los trabajadores municipales.
A estos delegados se han sumado los bomberos de Pontevedra, que han denunciado la falta de personal en el parque y que, a pesar de la sobrecarga de trabajo, "nos quieren imponer cinco guardias a mayores al año y horas extras que hay que realizar de manera forzosa".
"Estamos quedando bajo mínimos muchas veces", ha señalado Miguel Ángel Rivas (UGT). Los trabajadores piden que haya dos retenes mínimos de guardia por servicio porque "somos 38 bomberos, pueden reorganizar lo que quieran que la plantilla sigue siendo insuficiente".
Por su parte, los vecinos de Monte Porreiro han acudido al pleno dentro de la ronda de movilizaciones que tendrá su punto álgido el próximo sábado, con una manifestación a pie desde el barrio hasta Michelena 30, sede municipal, a partir de las once de la mañana.
Carlos Diéguez, presidente de la asociación de vecinos O Mirador, ha denunciado que la inversión de un millón de euros para Monte Porreiro haya desaparecido "porque non se lles deixou facer o que pretendían facer", dinero que exigen que se destine a mejoras en el barrio.
Ha reivindicado que se necesita el asfaltado integral de calles y no los "parcheados" que se están acometiendo, el arreglo de las aceras o la mejora del alumbrado público, entre otras actuaciones, como la reordenación del tráfico para "quitar coches que non veñen ao barrio".
Así, reclaman que se desdoble la calle Francia para que los tráficos de paso "non crucen polo centro da urbanización" y confían en que el Concello "recapacite" y retome las negociaciones con los vecinos para abordar la necesaria rehabilitación del barrio.