"Quise hacer bien y me cuesta la vida", las palabras de Germán Adrio recogidas en su diario ante los fusilamientos del 12 de noviembre
Por Mónica Patxot & Anxo Lourido
Nieves Gamallo Adrio, nieta de Germán Adrio e hija de Nieves Adrio Sobrido, recuperaba recientemente un diario inédito de su abuelo fusilado el 12 de noviembre de 1936, tras ser juzgado por rebelión militar y sentenciado a muerte.
Con motivo del acto de homenaje que en esta fecha se realiza ante el monumento dedicado a los diez hombres fusilados aquel día en A Caeira, Nieves Gamallo leía emocionada fragmentos de ese diario que su abuelo comenzó a escribir el mismo día en que lo detuvieron, además de la carta dedicada a su familia.
Relató cómo su abuelo había salido elegido como concejal en Pontevedra durante la segunda República y era miembro del Partido Socialista, además de maestro tras estudiar matemáticas en Santiago. En sus notas señalaba que creía que para la mayoría de apresados no había salvación, aunque no habían cometido delito alguno. Y afirmaba "quise hacer bien y me cuesta la vida".
Cuando conoció que los diez habían sido condenados a muerte afirmaba que él era ya un "muerto viviente desde el 13 de septiembre, fecha en que me notificaron el consejo sumarísimo y la pena de muerte", para a continuación afirmar que dejaba muchos escritos a sus hijos y a su esposa para que "puedan aprovechar para saber lo que es la vida y lo que se sufre en ella. Nada más".
Su última carta para la familia era serena y contundente: "Querida esposa y queridos hijos: Tranquilo y sereno voy hacia la muerte; nada hice para ello; por eso voy sin temor a Dios y sin cargo de conciencia; muero por tanto, sin remordimiento de haber hecho mal en esta ocasión. Acoged mi muerte con toda la resignación posible, daros cuenta de que emigré para siempre. No os metáis en gastos por mi defunción; pues los tiempos no están para ello. Os besa y abraza por ultima vez a todos, vuestro padre y esposo. Germán. Voy muy satisfecho de lo mucho que habéis trabajado por mi."
Junto a Germán Adrio Mañá, se recordó también a los maestros Paulo Novás Souto y Benigno Rey Pavón; al editor Ramiro Paz Carvajal; al abogado José Adrio Barreiro; a los médicos Amancio Caamaño Cimadevila, Telmo Bernárdez Santomé y Luis Poza Pastrana; al periodista Víctor Casas Rey; y al capitán Juan Rico González. Todos ellos eran asesinados en aquella fecha fatídica en A Caeira.
El acto, al que asistieron alrededor de un centenar de personas, contó con la música del trío Lerze y las intervenciones de Xaquín Moreda, concejal de Memoria Histórica, y del alcalde Miguel Anxo Fernández Lores, que reconoció que "é entrañable ver que, aínda que fose tarde, algunhas das súas últimas palabras si chegaron a ser lidas polas súas familias. Unha carta e un diario que recollen pensamentos que por fin acharon un lugar onde quedar por sempre, o mellor destino posible: os corazóns dos seus seres queridos, do seu legado, dos seus descendentes". Y quiso recordar también a aquellas víctimas enterradas en el anonimato y en la vergüenza. También hizo mención a todas aquellas personas que sufieron la violencia y la barbarie que lograron sobrevivir para continuar luchando contra la injusticia. Concluyó sentenciando: "a súa memoria brilla hoxe e brillará para sempre, e nunca o silencio volverá ser o protagonista da nosa historia".
Relacionadas:
-
'Dores', documental sobre campos de concentración en Galicia, se proyecta este viernes en el Teatro Principal
Por Redacción |
-
Dieciocho vidas truncadas por el franquismo a las que Galicia quiere reparar
Por Alejandro Espiño |
-
"Parece que todo esta resolto e se pode pasar páxina, pero non é así"
Por Redacción |
-
La Gala da Memoria homenajeará a través de la música a las personas asesinadas y represaliadas por el franquismo
Por Oskar Viéitez |
-
Música y palabra para combatir el silencio y el olvido
Por Natalia Puga & Mónica Patxot |