La fachada principal del Hospital Provincial del Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra se iluminó este jueves para recordar el dolor por las pérdidas perinatales. Con esta iniciativa, que este año pidió la asociación Bolboretas no Ceo, el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés se adhirió a la conmemoración del día mundial de la concienciación sobre la muerte gestacional y perinatal, visibilizando este dolor.
Este tipo de fallecimientos gestacionales y perinatales se producen en un período extenso: los que fallecen luego del alumbramiento o incluso intrautero. También se producen de forma temprana, casos en las primeras semanas de embarazo y pérdidas al final del período xestacional. Otros fallecimientos se producen por interrupción del propio embarazo e incluso de manera espontánea.
Segundo señalan desde la Unidad de Partos del Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra, para las madres y padres la muerte gestacional o neonatal es una experiencia tremendamente dura. Por eso, en estos casos que se dan en el contexto asistencial del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés es determinante el acompañamiento, la empatía, el fomento de la asistencia individualizada y la continuidad en las atenciones.
De este modo se alcanza por parte de las mujeres y sus parejas un proceso autónomo de toma de decisiones de tipo clínico o con el cuidado del niño, incluso sobre su despedida.
Según subraya la supervisora de la Unidad de Partos del Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra, Natalia Alonso, "tanto o coidado do bebé falecido tras o parto, a atención e acompañamento nesa perda e todo o seguimento posterior son sen dúbida procesos importantes polo seu papel en canto á validación social da propia experiencia do dó, pero tamén a nivel individual".
El trabajo de equipo en la Unidad de Partos del Complejo Hospitalario Universitario pontevedrés en estas situaciones está mostrando que la mayoría de madres y padres que experimentan una pérdida de este tipo corroboran los beneficios de poder despedirse de su bebé tras su pérdida, incluso viéndolo y cuidándolo.
Los objetos de recuerdo del bebé y de su tiempo en el hospital se revelan como recursos de un alto valor, que favorecen el proceso de duelo como casuística adaptativa que se produce en las pérdidas.
"É un momento clave para os pais, que poden coidar ao seu fillo e ter a certeza de que o meniño teña unha despedida axeitada", señala Natalia Alonso.