El conflicto de ENCE 'se cuela' en la salida de La Vuelta a España en Sanxenxo
La Vuelta a España no ha tenido una salida tranquila en la etapa que este sábado arrancaba desde Sanxenxo. Los trabajadores de Ence, convocados por la sección sindical de Comisiones Obreras, han aprovechado el paso de la caravana ciclista para dar visibilidad a su conflicto.
Cerca de medio centenar de trabajadores llegaron a Sanxenxo sobre las diez de la mañana, casi dos horas antes de la salida de la carrera. Se reunieron en las inmediaciones de la Igrexa Nova, con la intención de acudir hasta el puerto deportivo y tratar de retrasar la salida de la prueba.
Ana Cedeira, presidenta del comité de empresa de las oficinas de Ence, fue la encargada de explicar a los agentes de la Guardia Civil que, aprovechando la presencia en Sanxenxo de medios nacionales e internacionales, "queremos que se nos vea".
"Queremos que la ministra para la Transición Ecológica se digne a venir a Pontevedra y a tener una reunión con nosotros", aseguró Cedeira, al entender que "es la única solución que tenemos ahora los trabajadores".
Los manifestantes pretendían retrasar la salida de La Vuelta "media hora o 45 minutos" con una sentada y, a partir de ahí, garantizaban que "no vamos a hacer nada más" y que, en todo caso, "no vamos a interrumpir nada cuando estén ya andando".
"Pasado ese tiempo nos vamos y ya está", añadía la presidenta del comité. Pero sin éxito. Las autoridades fueron muy claras. "No puede ser ni dos segundos", les han explicado los agentes.
La opción que les autorizaron, según los trabajadores, es poder dar visibilidad a su conflicto en el arranque de la etapa, pero sin provocar demoras en la salida. Con esa idea, los trabajadores se encaminaron hacia el paseo de Silgar, punto de inicio de la etapa.
Pero al llegar, la Policía Nacional blindó los accesos al recorrido y les advirtió que habría importantes sanciones económicas si impedían el paso de la carrera. Solo les quedó elevar sus pancartas, en las que se podía leer "Sánchez escoita, Ence está en loita", y gritar sus consignas.
Hubo un segundo intento por hacerse ver en medio de la caravana de La Vuelta, ya que tras el paso del pelotón, que iba con la salida neutralizada, gran parte de los trabajadores subieron hasta la calle Progreso para continuar con sus protestas. Eso sí, sin interrumpir el paso de los ciclistas.
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