Suspenden un juicio contra un acusado de quitarle dos dientes a otro en una pelea porque la víctima no aparece
Por Natalia Puga
La Audiencia Provincial de Pontevedra ha tenido que suspender este jueves un juicio previsto contra un hombre acusado de agredir a una persona en las inmediaciones de un bar de copas de Pontevedra causándole la pérdida de dos dientes. El motivo de la suspensión es que la víctima no se presentó a la vista oral.
El tribunal le dio primero un margen de más de una hora para ver si se presentaba y finalmente decidió aplazar el juicio hasta el próximo 15 de julio para dar tiempo a que el hombre se presente cumpliendo la citación correspondiente.
En esta causa, el supuesto agresor se enfrenta a cinco años de cárcel y a su expulsión de España por un delito de lesiones causantes de deformidad.
La Fiscalía pide a la sección segunda de la Audiencia que una pena tan elevada porque considera que debe aplicarse la circunstancia agravante de reincidencia, ya que el acusado ya había sido condenado en marzo de 2016 como autor de los delitos de robo con violencia y lesiones.
En aquel momento, f fue condenado a dos años y tres meses de prisión, pero la pena fue suspendida y no entró en prisión a condición de que no cometiese ningún delito durante tres años. Incumplió esta condición porque los hechos que va a juzgar ahora la Audiencia ocurrieron el 7 de mayo de 2017, al año siguiente, de modo que ahora la Fiscalía pide que cumpla íntegramente cinco años de prisión.
El acusado es de origen colombiano y la Fiscalía pide que la mitad de esta pena se cumpla en España y el resto sea sustituida por su expulsión de territorio español durante seis años.
Además, solicita que el acusado indemnice a la víctima con casi 7.900 euros, dinero al que debe sumar el coste de la reconstrucción dental, y que abone al Servizo Galego de Saúde con los gastos generados por la primera asistencia en el Hospital Montecelo de Pontevedra.
Los hechos ocurrieron sobre las ocho de la mañana. La víctima comenzó a discutir con otra persona en las inmediaciones de un local de ocio nocturno de Pontevedra y el acusado intervino en la discusión. Según la Fiscalía, "movido por la intención de causarle un menoscabo en su integridad física", le pegó un puñetazo en la cara a la víctima, golpe que le alcanzó la boca y le partió varias piezas dentales.