La Policía Autonómica y Os Palleiros descubren y rescatan otro perro en Bora, atado y malnutrido
A raíz de la noticia del rescate de una perra en Bora por parte de la Policía Autonómica y la protectora de animales Os Palleiros, recibieron otra denuncia de forma anónima, alegando que los mismos dueños tenían a un cuarto perro en la parte trasera de la casa, en condiciones mucho peores que la de los otros tres perros. La Policía Autonómica fue a la propiedad para comprobarlo en la tarde del viernes 19.
Aunque en un principio se pensaba que se trataba de tres perros, dos de los cuales el dueño se negaba a entregar, argumentando que eran suyos, se encontró a un cuarto perro con el que la protectora no contaba. La información la recibió la propia asociación a través de una denuncia anónima, en la que la persona aseguraba que los dueños tenían otro perro detrás de la casa y en peores condiciones que los otros tres.
La entidad alertó a la Policía Autonómica, quienes por el momento están a cargo del caso. Los agentes se presentaron en la casa por la tarde del viernes 19 de febrero y constató que, efectivamente, había otro perro en la parte trasera de la casa. El dueño accedió a entregarlo, ya que el animal no tenía micro chip, y esto posibilitó firmar la renuncia de una manera más sencilla que con los otros dos, que continúan bajo su custodia.
El perro se encuentra en pésimas condiciones, además de que notaron la presencia de muchas pulgas y garrapatas. También estaba muy delgado, debido a que había estado llevando una alimentación muy pobre e insuficiente, según afirmó Gloria Cubas, la portavoz de la protectora. Incluso se podía ver que no tenía fuerza en las patas traseras, y que no se podía mantener en pie; aunque cabe la posibilidad de que se deba a su elevada edad o si es por falta de masa muscular al no tener espacio para moverse. Por el momento habrá que esperar a una revisión por parte de la veterinaria para que constate a qué se debe su estado de salud, declaró la reresentante de la asociación de animales.
Los otros dos perros continúan con el dueño, alegando este que le pertencen y asegurando que los mantendrá en mejores condiciones. Declaró también que va a cerrar la finca para que los cans puedan utilizar ese espacio para moverse, ya que cuando se encontraron estaban atados con una cadena de medio metro y viviendo entre sus propios excrementos. La policía autonómica está pendiente de la situación y revisa el estado de los perros cada dous días.
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