La zona de O Vao es, junto con Campelo y el sector del marisqueo, uno de los puntos calientes de la covid-19 en Poio. Como lugar en el que el avance de la enfermedad preocupa de manera especial, este martes comenzó un cribado general al que está citada la totalidad de los 420 vecinos de la zona, y que desde las 9.00, y durante varias horas de la mañana, dejó imágenes singulares como personas que acudieron incluso en pijama, pero, sobre todo, una imagen de normalidad y seguimiento masivo de la población.
Comenzó en esta primera jornada con 172 personas citadas, los residentes en la zona conocida como el poblado de O Vao de Arriba, y para el miércoles están citados en horario de mañana y tarde los habitantes de O Vao de Abaixo y también del resto de esta zona de Poio, las casas ubicadas fuera del poblado chabolista.
El alcalde de Poio, Luciano Sobral, Nito, se desplazó este martes hasta la zona en la que se está haciendo y pudo comprobar que, en la primera jornada, "la gente cumplió", acudieron "muy ordenados" y de manera "masiva".
Algunos andando y otros en coche, toda la población que estaba llamada al cribado acudió a la carpa instalada en la explanada junto al local social de la Asociación de Vecinos de O Vao, en la parroquia de San Salvador, en la que el personal del Servizo Galego de Saúde hizo pruebas PCR a todos ellos.
Sobral explica que en el Concello tuvieron constancia de la situación de la zona de O Vao el pasado viernes a través de informaciones de la gerencia del área sanitaria, que les pidió colaboración para preparar el cribado y también que la Policía Local reforzase la vigilancia en la zona.
El propio alcalde y los responsables policiales se reunieron con el patriarca del poblado y hicieron una petición general a población para que se autoconfinara. Además, se reforzaron los controles durante todo el fin de semana y confirma que "masivamente cumplieron".
Durante esta primera jornada de cribado en O Vao, el Servizo Galego de Saúde y el Concello de Poio tuvieron constancia de un "bulo" que hablaba de que el cribado se había suspendido por razóns de orde pública. Las dos instituciones niegan que haya sucedido y garantizan la normalidad en la actividad.