El nuevo colector de la Avenida de Ourense ya se encuentra en funcionamiento.
El Concello de Marín desca que esta fue una obra de saneamiento "imprescindible", que mejorará el ecosistema de la ría de Pontevedra. Su ejecución estuvo incluida en un convenio firmado entre el Ayuntamiento y la Xunta de Galicia, a través del organismo Augas de Galicia, y supuso una inversión de 1.802.130 euros.
Según explicó la concejal de Medio Ambiente, Marián Sanmartín, la empresa ejecutora de la obra, Copcisa, finalizó con la fase final de la obra retirando las bombas que se encontraban en la Estación de la Lonja, dentro del recinto portuario. Esa estación queda ya oficialmente clausurada y a partir de este momento el saneamiento funciona a través del nuevo colector.
En estos momentos, la Avenida de Ourense está en plena transformación. Esta humanización forma parte de la estrategia Marín Dusi y ya lleva parte de su ejecución avanzada.
El proyecto contempla diferentes distribuciones del espacio urbano. En un primer tramo, con el inicio en Cantodarea, se está habilitando una acera de 2 metros de ancho, una senda peatonal de 3,5 metros y el carril bici, de 3 metros.
Después habrá una vía coexistente para los peatones y el carril de 3 metros de ancho en total y finalmente, entre el Concello y la Plaza de España, el espacio se distribuirá en 3 metros de acera y 2,5 metros destinado al carril de las bicicletas.
"Se trata de una humanización integral con la que conseguiremos una Avenida de Ourense cómoda y sostenible para todos", declara la alcaldesa, María Ramallo. También para el medio ambiente, ya que fue adjudicado un lote específico para la renovación de todo el alumbrado, que pasará tener tecnología LED, lo que redundará en un importante ahorro energético.