Denuncian el mal control de los rastreadores en el seguimiento de positivos en las comunidades escolares de O Grove
Por Redacción
El gobierno de José Cacabelos en el Concello de O Grove denuncia la "deficiente o nula actuación" de los sistemas de rastreo y control de la Xutna de Galicia durante esta segunda ola de la pandemia de la covid-19.
Desde este municipio alertan de que no existe constancia de que se realicen controles o seguimientos de la evolución del virus en esta localidad. Una situación que, según indican desde el Concello, agrava todavía más el problema en relación con el alumnado y profesorado de los centros educativos que han tenido contacto estrecho con alguna persona positiva.
Señalan que los centros educativos comunican cualquier incidencia a la Xefatura Territorial de Sanidade de manera inmediata pero los rastreadores tardan entre cinco y siete días en comunicarse con los contactos estrechos de estos positivos y, en determinados casos según denuncian los padres, nunca llega a producirse la comunicación.
"Estas demoras resultan injustificadas", afirman desde el Concello de O Grove, sobre todo porque desde la Consellería se les indicó que los rastreadores eran "suficientes" pero en ningún momento especificaron el número de personas que realizan esa tarea.
Según explican, ante los casos positivos en los centros educativos, Sanidade señaló que los contactos estrechos deberían permanecer en confinamiento durante 14 días, sin asistir a las clases. Una situación que, para el Concello, contradice el protocolo ya que el confinamiento solo debería producirse, de forma excepcional, si el estudiante no fuera sometido a una PCR. El protocolo indica, según el gobierno local, que debe realizarse una PCR en los primeros días y otra en el décimo día y, en caso de resultar negativas, el estudiante puede reincorporarse y no esperar 14 días confinado.
Como ejemplo señalan que tres de los once estudiantes confinados el 29 de octubre debido a un contacto estrecho con un positivo detectado el 26 de octubre realizaron su primera PCR el 5 de noviembre, diez días más tarde de que se produjera el contacto estrecho. Estos tres estudiantes recibieron llamadas de tres personas diferentes cada uno; al primero se le indicó que la prueba fue negativa y que, por tanto, su aislamiento ya acababa: Al segundo se le dijo que su aislamiento había terminado, a pesar de no contar con los resultados de la prueba y al tercero también se le indicó que la prueba había sido negativa, pero que debía mantenerse en aislamiento mientras no se realizara una segunda PCR. Los otros ocho estudiantes confinados no recibieron ningún tipo de mensaje para informarles sobre los resultados de la prueba.
El Concello de O Grove denuncia el riesgo y la incertidumbre que provoca esta situación en los centros educativos y en los familiares. Por este motivo, reclama a la Consellería de Sanidade que asuma su responsabilidad y que sigan los protocolos y normas que establecen sus propios servicios de epidemiología y prevención. Lamentan la situación de descontrol actual y piden que se evite la propagación del virus a través de un rastreo eficaz.