El arzobispo de Santiago pide a la Peregrina "por las personas y familias que sufren las consecuencias de la pandemia"
Por Natalia Puga & Cristina Saiz
La crisis sanitaria derivada del coronavirus dejó este año a los fieles sin la ofrenda floral del sábado y la ofrenda institucional del domingo a la Virgen Peregrina, pero la patrona de la provincia no quedó sin homenaje en su fin de semana grande y este domingo tuvo lugar en el santuario de la Peregrina una Misa Pontifical oficiada por el arzobispo de Santiago, Julián Barrio Barrio.
El acto litúrgico se celebró a mediodía de este domingo y se convirtió en el principal acto religioso de este 2020 en la honra de la Virgen Peregrina. El templo dejó imágenes bien diferentes a las de años anteriores, pues tan sólo pudieron acceder al interior 48 personas, la mitad de su capacidad. Para compensar esta restricción se colocaron sillas en el patio del santuario para otras 14 personas.
Este año tampoco contó la Virgen con el respaldo de la amplia representación de autoridades de agostos anteriores. Entre los asistentes, estuvieron el comandante-director de la Escuela Naval de Marín, el capitán de navío Ignacio Cuartero Lorenzo; las concejalas del PP Pepa Pardo y Silvia Junco; e incondicionales de los oficios en la honra de la Virgen como Alejandro Millán Mon, Rosana López Salgueiro y el presidente de la Cofradía de la Divina Peregrina, Ignacio Landín.
Ante este público más reducido y con mascarilla de protección, Julián Barrio hizo la ofrenda de los pontevedreses en el altar y pidió a la Virgen "por las personas y familias que sufren las consecuencias de la pandemia", así como "por aquellos que buscan el bien común y la renovación ética y moral de nuestra sociedad, ofreciendo sus mejores esfuerzos para lograr una convivencia a decir verdad, libertad, justicia y paz".
Julián Barrio también pidió "que nuestra señora del refugio, la Virgen Peregrina, nos proteja siempre con la fuerza de su amor" y aseguró hacer esta ofrenda en nombre de todas las personas presentes, pero también de todas las que este año no pudieron acudir a los actos religiosos por las restricciones vinculadas a la pandemia, una "situación tan inesperada que tantas consecuencias nos está trayendo".
Además, para compensar que no hubo ofrenda de la Deputacion Provincial, Ignacio Landín hizo una monición de entrada en la que tuvo unas palabras de recuerdo para todas las personas que fallecieron en el último año, "especialmente durante los duros momentos de la pandemia".
Dirigiéndose a la Virgen Peregrina, dijo que es "nuestro ejemplo de humildad" y "nuestro refugio ante las sacudidas de nuestra vida".
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