Una experiencia "inspiradora" para la Lisboa que tiene que surgir tras la COVID-19. Así describieron a Pontevedra en el debate sobre movilidad que se celebró este jueves en la capital portuguesa y en la que participó el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores.
El encuentro tuvo lugar en la terraza del café lisboeta 'A Brasileira' y se enmarca en una serie de encuentros denominados 'Debatir la ciudad. Regresar a la ciudad', para reflexionar sobre el efecto de la pandemia en la recuperación de la capital lusa.
Según ha explicado la moderadora del debate, la periodista y exdirectora ejecutiva del Diario de Noticias, Catarina Carvalho, la presencia del alcalde de Pontevedra en esta cita obedece a que gracias al trabajo realizado en los últimos 20 años, no precisó de medidas específicas para facilitar la vuelta de las personas a la calle de forma segura tras el confinamiento.
El alcalde centró su intervención en dar una visión general de las claves del modelo pontevedrés, que resumió en recuperación del espacio público para las personas, calmado del tráfico, prioridad de la movilidad peatonal y políticas para dotar de actividad económica, cultural, deportiva y festiva a los espacios recuperados.
Ganar calidad de vida, aumentar población en el casco urbano, tener población menos envejecida o reducir emisiones y contaminación fueron los puntos que más interesaron durante el encuentro, al ser las principales preocupaciones de los organizadores del debate.
A la pregunta de si el modelo funcionaría en Lisboa o solo funciona en Pontevedra porque es una ciudad pequeña, Fernández Lores ha insistido en que "cada cidade ten que buscar o seu propio camiño pero, en todo caso, as cidades grandes poden apoiarse no transporte público".
La búsqueda de un modelo de ciudad sostenible, ha destacado el alcalde, "non é un problema só de Lisboa senón que todas as cidades teñen que tomar decisións para ser máis habitables, máis seguras e menos contaminantes e, neste sentido, a COVID está acelerando as cousas".
Además en el marco de la relación entre crisis sanitaria y recuperación económica, el alcalde de Pontevedra hizo mención al impacto de la recuperación de los espacios urbanos en el comercio de proximidad y en la economía local asegurando que la actuación pública en el espacio urbano "estimula a actividade económica privada".
Por último, también se refirió a la autonomía de las personas más vulnerables (niños, personas con discapacidad y personas mayores) y a la calidad de vida en general, indicando que "se non se fan actuacións deste tipo a poboación busca calidade de vida fóra da cidade, que era que pasaba en Pontevedra en 1999".
En el encuentro también participaron el concejal de Movilidad de Lisboa, Miguel Gaspar, la activista a favor del uso de la bicicleta, Rita Fernandes, el representante de la Asociación por la Movilidad Urbana en bicicleta, Mário Alves, y el presidente de la Xunta de Freguesía da Baixa Lisboa, Miguel Coelho.
Además de participar en este debate, Fernández Lores aprovechó su estancia en Lisboa para mantener encuentros con la prensa local para explicar el modelo urbano pontevedrés, entre ellos el canal de televisión TVI, la revista Visao o el periódico Folha de Sao Paulo.
A primera hora de la tarde se vio también con el presidente de la Cámara de Lisboa, Fernando Medina, para intercambiar impresiones sobre los efectos de la crisis sanitaria y la adaptación de las ciudades. En este sentido, el dirigente luso coincidió en ver la pandemia como una oportunidad para "avanzar en la dinámica de recuperar el espacio público y retirar los coches de la ciudad".