Los trabajos de limpieza y desinfección que el gobierno gallego obliga a hacer si los ayuntamientos quieren reabrir los parques infantiles supondría un gasto de medio millón de euros en Pontevedra, es decir, 1.400 euros diarios. Así lo aseguran los ediles Iván Puentes y Alberto Oubiña.
Desde el Concello, además de pedir que establezcan unos criterios "claros" para realizar la "asepsia diaria" y el cálculo de aforo permitido, reclaman que la Xunta "non empaquete" a los ayuntamientos esta responsabilidad "e deixe de xogar coa saúde dos pequenos".
La resolución autonómica, explica el responsable de Medio Natural, obliga a desinfectar los parques infantiles "de luns a domingo, xogo a xogo e en cada superficie", para lo cual Pontevedra tendría que disponer de cuatro equipos de dos personas trabajando de manera simultánea.
Teniendo en cuenta los turnos y los períodos de descanso, el Concello estaría obligado a contratar la doce personas para dedicarse "exclusivamente" a este trabajo, a mayores del coste de los materiales y de los productos específicos "porque a Xunta non se refire a un simple baldeo".
Por eso, desde el servicio de Parques y Jardines remitieron un escrito a Sanidade en el que se le solicita una indicación "detallada" sobre los procedimientos y productos a emplear y sobre los criterios para calcular los aforos en estas equipaciones.
El Concello asegura que, si bien ya dispone de los dispensadores de gel hidroalcohólico para instalar en las áreas de acceso a los parques infantiles, sería una "irresponsabilidade" reabrir los parques sin unos "protocolos precisos" y saber, por ejemplo, si debe ser obligatorio el uso de mascarilla y guantes o si llegaría con fijar una distancia mínima de 1,5 metros.
Desde el gobierno municipal insisten en que, toda vez que los requerimientos derivados de la resolución implicarían una "elevadísima" inversión, la Xunta debe aprobar ayudas autonómicas para cubrir estos gastos.
"Semella que queren cargarlle aos concellos un problema que nin eles mesmos son capaces de xestionar para a apertura dos centros escolares, onde controlar un rebrote sería máis sinxelo, ao telos a todos localizados, cousa que non acontece nos parques", lamenta Alberto Oubiña.
RUEDA APELA A CRITERIOS SANITARIOS
A este respecto, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha aclarado que estos protocolos "non son esixencias" del gobierno gallego sino de las autoridades sanitarias y se trata de medidas que van "en beneficio de todos".
"Se un concello decide non abrir os parques porque considera, polos motivos que sexan, esperar a que a situación se normalice máis é respectable", ha añadido Rueda, que ha defendido que la Xunta "aporta recursos" a los concellos a través de numerosos programas.
Entre ellos, ha citado los más de 120 millones anuales del fondo de cooperación local que, ha afirmado el vicepresidente gallego, "tamén se poden dedicar a iso se queren os concellos".
La Xunta, según Alfonso Rueda, "o que fixo foi poñer negro sobre branco" con respecto a lo que señalan los expertos en materia sanitaria para poder abrir los parques infantiles. "Os que teñen a competencia para abrilos ou non poden decidir o que proceda", ha añadido.
"Ao final é unha cuestión de prioridades", ha concluido el vicepresidente de la Xunta.