Ence refuerza sus acciones en Pontevedra en la lucha contra el coronavirus
La industria de la madera, el papel y la celulosa está jugando un papel muy importante en la dotación de recursos para afrontar la actual crisis sanitaria. Cabe recordar que con celulosa se fabrican productos sanitarios y de higiene imprescindibles, como son las mascarillas protectoras, las cajas de medicamentos, el papel higiénico o los pañuelos de papel.
Desde la declaración del estado de alarma, la biofábrica de Ence Pontevedra viene realizando diferentes acciones en la comarca para contribuir a la lucha contra el coronavirus, como son las donaciones de material para hospitales o medidas en apoyo del tejido empresarial, entre otras.
DONACIÓN DE MATERIAL SANITARIO
Ence y la empresa productora de papel tisú Kartogroup donaron en el último mes 24 toneladas de material sanitario, producidos con celulosa de la biofábrica de Lourizán a partir de madera gallega. Este material está xa a disposición de diversos centros sanitarios de la provincia de Pontevedra.
La entrega consistió en dos camiones de papel para uso sanitario, como rollos de papel higiénico y secamanos, a 44 centros de atención primaria y a los hospitales de Montecelo, Provincial y Salnés.
La pasta de papel donada es del tipo TCF, siglas que significan "totalmente libre de cloro", ya que la planta de Lourizán es una de las dos únicas de Europa que utiliza este procedimiento sostenible y respetuoso con el medioambiente.
De este modo, Ence y Kartogroup suman esfuerzos en la lucha contra el coronavirus dada la importancia que en esta situación cobra garantizar el suministro a los centros sanitarios de productos celulósicos, especialmente de papel tisú, principal destino de la celulosa de Ence, necesario en las medidas higiénicas necesarias para prevenir y combatir al coronavirus.
APOYO DIRECTO A LAS EMPRESAS LOCALES
Ence muestra también su firme compromiso con las pequeñas y medianas empresas locales de Pontevedra para intentar paliar las consecuencias económicas de la crisis sanitaria.
Este apoyo se ha materializado en la reciente compra, a la empresa Albino González, de 30.000 máscaras confeccionadas con tela homologada TNT (textil no tejido), de acuerdo a la guía técnica del Ministerio de Industria.
Este pequeño negocio situado en Pontevedra se acaba de reinventar para subsistir ante la situación actual. Tras 50 años dedicándose a la sastrería de caballero a través de la firma Confecciones Story, Albino González comenzó a confeccionar máscaras, batas o pijamas hospitalarios. La compra por parte de Ence de esta partida de máscaras supone uno empuje para esta empresa familiar ya que, según admitía su actual propietaria, Silvia González "si no llegamos a adaptarnos, la empresa echa el cierre definitivo en menos de un mes, dejando sin empleo a 11 trabajadores".
La situación actual provocó que miles de empresas se hayan visto obligadas a cesar su actividad durante el confinamiento, lo que podría desembocar, en muchos casos, en el cierre definitivo de los negocios. En este contexto, el pequeño comercio fue el más castigado por la emergencia sanitaria. Según calcula CEPYME (Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa), en torno al 60% de las PYMES se encuentra en situación de riesgo en España, lo que supone alrededor de 300.000 empleos. De hecho, solo en la comarca de Pontevedra, el paro aumentó más de un 4%, sumando un total de 13.037 despedidos, de los cuales cerca de 5.800 pertenecen a la ciudad del Lérez.
2.000 METROS DE TELA PARA MÁSCARAS
Además del apoyo al tejido empresarial, Ence también muestra su compromiso con la ciudadanía a través de la donación de 2.000 metros de tela para ayudar a confeccionar mascarillas en el municipio de Pontevedra.
En este caso, la empresa papelera respondió a la petición de un grupo de vecinas pontevedresas, las cuales pusieron en marcha una iniciativa solidaria para confeccionar mascarillas de forma totalmente altruista. La entrega consistió en una bobina de tela homologada textil no tejida (TNT) para ayudarlas en su labor.
Marieli Touza, María Rey y Marga Soliño fueron las artífices de este proyecto solidario, a las que se fueron sumando alrededor de 25 personas más. Gracias a las donaciones de empresas del municipio, como Ence o Tegal, este grupo de pontevedresas consiguen los recursos necesarios para confeccionar las mascarillas.
Este proyecto, que fue creciendo con el paso de las semanas, se nutrió principalmente del boca a boca y de la difusión en redes sociales, además de contar con la colaboración de asociaciones culturales y de vecinos, las cuales hicieron posible llegar a un amplio abanico de pontevedreses que no disponen de este material básico de protección ante el coronavirus.
Estas iniciativas solidarias son un ejemplo de la labor de Ence en apoyo a la economía local y la sociedad pontevedresa. El compromiso de la compañía con el entorno de su biofábrica de Lourizán es una prioridad. Así lo evidencia también el Plan Social de Ence Pontevedra, con el que, año tras año, Ence contribuye a mejorar la calidad de vida de los vecinos de Pontevedra.
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