Amplio despliegue de la Guardia Civil y de Policía Local en O Vao en respuesta al altercado del lunes

Poio
06 de mayo 2020

El poblado chabolista de O Vao de Arriba vivió en la tarde de este miércoles un macro control policial en el que se desplegaron varias decenas de agentes de la USECIC de la Comandancia de la Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local. Fue el primero de muchos durante toda la semana para hacer cumplir el estado de alarma y localizar a los implicados en el ataque 

Control de la Guardia Civil y la Policía Local de Poio en O Vao de Arriba / Mónica Patxot

El poblado chabolista de O Vao de Arriba vivió en la tarde de este miércoles un macro control policial en el que se desplegaron varias decenas de agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, con apoyo de la Policía Local de Poio. Fue el primero de muchos después de los graves incidentes registrados en la tarde-noche del lunes en esta zona del municipio de Poio, en el que los residentes atacaron a pedradas a guardias civiles y policías y causaron heridas en dos agentes y un vehículo. 

Según dio a conocer este miércoles el Concello de Poio, está previsto que a lo largo de esta semana se lleven a cabo controles fijos en los accesos al Vao, en los que participarán tanto la Policía Local de Poio como la propia Guardia Civil.

Este miércoles, en el primero de ellos, los agentes se desplegaron en las zonas comunes del poblado, sin hacer ningún registro, pero sí con presencia policial intensa.  El control comenzó alrededor de las cuatro de la tarde y se prorrogó durante varias horas en las que pidieron la identificación a todas las personas que llegaron al poblado y acompañaron su trabajo con la presencia de un dron.

Los cometidos eran varios. Por una parte, el cumplimiento del estado de alarma y las restricciones de desplazamientos que implica para el conjunto de la población y, por otra, una actuación vinculada con los incidentes de la tarde-noche del lunes, pues, según pudo saber PontevedraViva, los agentes buscaban poder localizar a alguno de los implicados en los altercados, que fueron identificados, pero no localizados

Todo ocurrió en la tarde-noche del lunes. La Guardia Civil realizó un amplio control en O Vao para vigilar el cumplimiento del estado de alarma y, cuando procedieron a identificar a una persona, reaccionó agrediendo a un agente. El presunto agresor fue detenido y los vecinos del poblado reaccionaron a pedradas contra los guardias civiles, llegando a provocar daños en un vehículo oficial. 

En esa agresión a pedradas no resultó herido ningún guardia civil y, terminada la intervención, los agentes abandonaron el poblado y regresaron a la Comandancia pontevedresa. Poco después, se produjo un segundo incidente en el que resultaron heridos dos policías de Poio.

Según informó el Concello de Poio, los agentes municipales acudieron al poblado tras recibir un aviso del 112 y, a su llegada, ocurrió el altercado. Ya habían transcurrido varios minutos desde que los guardias civiles habían abandonado el lugar y los dos policías de Poio que llegaron solos fueron recibidos a pedradas que causaron daños en su vehículo policial y heridas a los dos agentes. A raíz de esa agresión, se pidió un refuerzo policial y se desplazaron hacia O Vao varias patrullas de la Guardia Civil, de la Policía Nacional y también de la Policía Local de Pontevedra, produciéndose un altercado violento que finalmente logró solventarse.

La investigación sobre lo sucedido el lunes permanece abierta, de modo que la Guardia Civil no facilita detalles de un operativo aún en marcha. El Concello sí indica que hay una decena de personas identificadas e insiste en que la agresión "no va a quedar impune" y trabaja para que los responsables del ataque respondan ante la Justicia por estos hechos. 

El Concello de Poio anunció este miércoles su primera medida como responde al ataque sufrido por dos agentes de la Policía Local. El alcalde, Luciano Sobral, remitió una comunicación urgente a la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra pidiéndole que ahonde  en una "colaboración exhaustiva y diaria" entre los cuerpos de seguridad, "especialmente en las entradas al poblado y en aquellas actuaciones y dispositivos que tengan que ver con el control de los diferentes ámbitos en los que actúa la Policía Local".

El escrito propone el refuerzo de patrullas, contando con una mayor colaboración por parte de la Subdelegación del Gobierno, dado que la problemática del Vao es una cuestión que no puede asumir en solitario el Concello, debido a su complejidad.