Feijóo "no avala" el plan de desescalada del Gobierno y critica que se hizo "de espaldas" a Galicia
Por Natalia Puga
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, se ha mostrado muy crítico con el Plan de Desescalada presentado por el Gobierno para salir del estado de alarma dictado para frenar el coronavirus y lo ha rechazado por completo asegurando que el Gobierno gallego "no avala" el documento, al que atribuye "algunas luces y muchas sombras".
Feijóo sostiene que el plan "debe ser modificado" y que no cuenta con el respaldo de la Xunta porque se hizo "de espaldas a las comunidades autónomas", entre ellas, a Galicia. Así, cuestiona que el documento hace referencia a parámetros sanitarios consensuados con las autonomías, cuando con Galicia, al menos, no se ha consensuado y las comunidades tienen un "papel testimonial". Su propuesta es que se apruebe en la conferencia de presidentes tras escuchar a los distintos gobiernos autonómicos.
En una comparecencia ante los medios para evaluar el plan, Feijóo mostró su confianza en que el Gobierno "deje mejorar" el documento y apueste por "trabajar juntos", pues, a su juicio la mejor forma de afrontar la situación es trabajar "de forma coordinada y leal y no a través de imposiciones, con órdenes ministeriales que a veces modifican unas a otras".
Entre otras críticas, sostiene que el plan "está pensado para realidades urbanas, no rurales" y eso provoca que muchos municipios que, por su tasa de contagios, ya estarían preparados para la fase 3, pero "tendrán que esperar semanas" hasta poder llegar a la situación que permite esa fase.
Además, sostiene la "necesidad de replantearse" la movilidad provincial, pues, poniendo como ejemplo la provincia de Pontevedra, explicó que "no tiene sentido" que un ciudadano no pueda ir a Ourense o a localidades de A Coruña hasta el 22 de junio y recordó que en Galicia hay muchos pueblos que están divididos entre dos provincias.
El 10 % de la población gallega, 266.000 gallegos, viven en 70 municipios limítrofes entre provincias, aseguró Feijóo, que cree que "lo lógico es que si dos provincias tienen situaciones epidemológicas similares, pueda haber movilidad". Ante esta situación, pide que la unidad que se tome como referencia sea el área sanitaria, no la provincia,
El presidente de la Xunta también critica la "indefinición" del plan en cuestiones que afectan al comercio, la acividad pesquera, el rural, los hoteles o la restauración y cree que el Gobierno debe "despejar incógnitas" como, por ejemplo, por qué en la fase 2 se puede quedar en una terraza con un familiar, pero no se puede ir a su casa.
Además, cuestiona que, a día de hoy, la Xunta desconoce los criterios sanitarios que tiene que alcanzar para cambiar de fase. Así, Feijóo comparte que la desescalada se lleve a cabo de una forma gradual, con períodos de dos semanas entre cada fase y aplaude que se hayan adoptado propuestas que la Xunta había planteado como abrir el comercio con cita previa, pero, en general, ve que es un documento "confuso y discrecional".
Otro aspecto que no convence a Feijóo es el criterio para llevar a los niños menores de 6 años a centros educativos. "Nos sorprende que el criterio para abrir las guarderías sean que los padres tengan trabajo o no. Los padres que perdieron el trabajo dudo que compartan ese criterio. Yo tampoco", sostiene el presidente, que ya avanzó que intentará que se aclare.
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