Culpable de dar muerte a navajazos al marido de la que había sido su pareja de forma intermitente y de hacerlo, además, con alevosía y ensañamiento. Este es el veredicto dictado este viernes por el jurado que desde el pasado lunes juzgó el conocido como crimen de Ponte Caldelas en la Audiencia de Pontevedra. Tras nueve horas de deliberación, concluyó que Marcos Vidal acabó con la vida de Manuel Rivas sin darle la posibilidad de defenderse y que le dio "más puñaladas de las necesarias para causar más dolor".
En base al veredicto del jurado, el fiscal del caso considera que Marcos Vidal es autor de un delito de asesinato en el que concurren las circunstancias agravantes de alevosía y ensañamiento y las atenuantes de confesión y dilaciones indebidas y a pedir que sea condenado a 20 años de prisión, justo la misma pena que ya mantenía desde el principio.
Los abogados de las dos acusaciones particulares, sin embargo, elevaron esa petición a 23 años y el abogado defensor de Marcos Vidal cree que su cliente debe ser condenado a diez años y un día.
Tras escuchar el veredicto del jurado, tanto el abogado defensor de Marcos como el abogado de la acusación particular que representa a la familia del fallecido pidió a la magistrada de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial que ahora deberá dictar sentencia que deduzca testimonio por la declaración de Sandra Martínez Araújo, viuda del fallecido, durante el juicio.
El abogado del acusado cree que cometió un delito de falso testimonio porque volvió a decir durante el juicio que Marcos Vidal cometió contra ella un delito de maltrato por unos hechos que ya fueron juzgados y por los que fue absuelto.
En el caso del abogado de la acusación particular, pide que se deduzca testimonio por su posible participación en un delito de asesinato, al considera que en el juicio se demostró que pudo tener cierta participación en los hechos de los que Marcos ha sido declarado culpable. Sandra Martínez ya estuvo investigada por estos hechos en el pasado, pero la causa se archivó, de modo que este abogado pide al tribunal de la Sección Cuarta que reabra la causa archivada provisionalmente. En caso de que el tribunal no vea su posible participación en un delito de asesinato, pide que se deduzca testimonio por un delito de falso testimonio.
El jurado se encerró a deliberar sobre las 11.30 horas de la mañana de este viernes y a las 20.50 horas su portavoz se puso en pie y leyó el veredicto, que en los puntos principales refleja una decisión unánime del jurado.
Los miembros del tribunal popular consideraron probado que el 28 de noviembre de 2015 Marcos Vidal se dirigió al domicilio de Sandra Martínez Araújo, con la que había mantenido "una relación sentimental de forma intermitente", esperó en el descansillo a que saliese el marido de ella, entró con él a la vivienda y, cuando comprobó que había dormido allí y seguía teniendo una relación con la mujer, le atacó.
Según el jurado, le tiró al suelo, le inmovilizó el hombro derecho y le asestó numerosas puñaladas con una navaja "con el propósito de acabar con su vida", siendo tres de ellas mortales. A continuación, según consideran probado e forma unánime, llamó a Sandra Martínez, le hizo una foto a Manuel y se la mandó.
El jurado no fue unánime a la hora de terminar que el ataque fue sorpresivo e inesperado, sino que en este punto se obtuvo una mayoría de 8 a uno. Sí Fueron unánimes los jurados a la hora de terminar que le atacó con una navaja y con abuso de superioridad y también que le dio más puñaladas de las necesarias.
El jurado también considera probado que el acusado confesó y que en este procedimiento judicial se produjeron dilaciones indebidas.