Dos años y medio de prisión por atropellar en Noalla a su pareja, de la que tenía orden de alejamiento
Por Natalia Puga
La Audiencia Provincial de Pontevedra acaba de confirmar una condena previa del Juzgado de lo Penal número 4 de Pontevedra contra un vecino de Noalla, en Sanxenxo, que reconoció haber atropellado a su pareja, causándole graves lesiones. La pena recién confirmada implica dos años de prisión por un delito de lesiones y otros seis meses por quebrantamiento de condena.
El acusado se conformó con esta pena impuesta por el Penitenciario, pero el caso llegó a la Audiencia porque la víctima recurrió por discrepancias con la responsabilidad civil que deberá abonarle: 71.896,54 euros por las lesiones (14.107,18 euros por los días de sanidad, 4.7504,14 euros por secuelas funcionales, 10.285,22 euros por perjuicio estético, más factor de corrección en todos los casos) y 3.180 euros por los gastos de fisioterapia.
La víctima, vecina de Vilanova, y el acusado, de Sanxenxo, habían mantenido una relación tiempo atrás, durante la que el acusado había sido condenado por el Juzgado de Instrucción número 3 de Vilagarcía de Arousa por un delito de maltrato a las penas de 32 días de trabajos en beneficio de la comunidad, 8 meses de privación a la tenencia y porte de armas, 12 meses de prohibición de aproximación y comunicación a la víctima.
A pesar de ello, semanas después de la condena, retomaron su relación de pareja y el día de los hechos, el 2 de noviembre de 2012, quedaron en el domicilio del acusado en Noalla con motivo del cumpleaños de él. A la llegada de la mujer, el hombre estaba en su coche Volkswagen Golf con la intención de abandonar su domicilio y ambos empezaron a discutir acaloradamente. El motivo de la pelea es que ella se había retrasado en su hora de llegada y él se lo reclamaba de manera alterada y nerviosa.
La chica se subió al vehículo y allí continuó la discusión, llegando ella a quitar las llaves del contacto para evitar que se marchara. Sin embargo, él se las pidió, ella se las regresó y él encendió el coche. En ese momento, ella decidió bajarse del vehículo y colocarse delante del mismo, sin que el acusado perdiera contacto visual con ella en ningún momento. Cuando ella se estaba sentando en el suelo para evitar que él abandonara el lugar, la atropelló.
Según consta en la sentencia con la que él mostró su conformidad, el acusado actuó "con la clara intención de menoscabar su integridad física y psíquica", arrancó el coche de tal forma que le pasó por encima del cuerpo de su pareja, primero con las ruedas delanteras y después con las traseras.
Como consecuencia de estos hechos, la mujer sufrió erosiones, contusiones y fracturas graves por todo el cuerpo por las que tuvo que ser ingresada en el hospital y operada, quedándole cicatrices y secuelas físicas y psíquicas.
La condena inicial ahora confirmada por la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial declara al acusado autor de un delito de lesiones en el que concurre la atenuante de dilaciones indebidas -los hechos pasaron en 2012 y se juzgaron en 2019- y la agravante de reincidencia y le impone dos años de prisión y prohibición de aproximación a una distancia inferior a 200 metros de su víctima y de comunicación con ella durante ocho años. Además, le condena por un delito de quebrantamiento de condena con la misma atenuante de dilaciones indebidas a seis meses de prisión.