La cabeza de lista del BNG al Congreso, Carme da Silva, mantuvo un encuentro con representantes del pequeño comercio de Pontevedra este martes para trasladarles las iniciativas que el Bloque trasladará de cara a las elecciones generales de este 28 de abril.
Una de las principales propuestas es la de modificar la legislación actual que está pensada desde Madrid para favorecer a las grandes empresas de distribución y de comercialización que limitan las alternativas de contratación real para el comercio local y las empresas de pequeño formato.
De esta manera, explicó a los empresarios que la reciente normativa pone trabas a las empresas de pequeñas dimensiones para competir con las grandes multinacionales a la hora de prestar servicios a las administraciones.
En este sentido, Carme da Silva explicó a los comerciantes que antes del cambio legislativo los concellos podían optar por el comercio local a la hora de afrontar cualquier contrato, desde material de oficina, limpieza o talleres mientras que la actual legislación lo impide.
La tarifa eléctrica es otra de las propuestas que el BNG quiere llevar al Parlamento. Da Silva plantea una tarifa eléctrica gallega que resulte un 30% más económica que la vigente, que resulte más beneficiosa para empresas y para familias. Señala que a pesar de producirla se paga la tarifa más cara del Estado. Por este motivo, los nacionalistas reclaman el mismo tratamiento que ya tienen los vascos con una tarifa propia.
La candidata del BNG, que participó en esta reunión acompañada del alcalde Miguel Anxo Fernández Lores y de la concejala de Promoción económica, Anabel Gulías, recordó también que es necesario que el BNG sea protagonista porque solo en su etapa en Madrid se condicionaron las políticas del Estado respecto a Galicia.
En este sentido apuntó a que el BNG, según todas las encuestas, es la opción política que tiene más posibilidades de disputar directamente el escaño por Pontevedra con Vox y Ciudadanos. Carme da Silva entiende que esa derecha es la que quiere llevar a Galicia 40 años atrás y hay que ponerle freno votando este 28 de abril pensando en Galicia.