La antigua escuela de Cons acogerá un homenaje a la Mourente represaliada en el 36

Pontevedra
03 de octubre 2018

La cita es el sábado 6 de septiembre a las 19.30 horas y contará con la participación de la descendencia de las personas homenajeadas. Se descubrirá un panel informativo sobre la represión en la parroquia que tuvo más relevancia en la II República

Las mujeres fueron las víctimas más silenciadas y las principales voces de la memoria de aquel tiempo
Las mujeres fueron las víctimas más silenciadas y las principales voces de la memoria de aquel tiempo / Concello de Pontevedra

La antigua escuela de Cons acogerá el próximo sábado, 6 de octubre, a partir de las 19.30 horas un homenaje a las personas represaliadas de Mourente. Es la parroquia del municipio que más relevancia política consiguió en el primer tercio del siglo: un vecino suyo, Manuel Portela Valladares, llegó a ser presidente de la II República.

Su hermano por parte de padre fue Heraclio Botana, diputado en las Cortes y fundador junto a José Araújo, también nacido en la parroquia, del Partido Socialista en Vigo. Y en el momento del golpe había dos vecinos ostentando el bastón de alcalde: Severino Couto, el Cantero, en el Concello de Ponte Canedo (luego anexionado a Ourense) y Manuel García Filgueira en el de Pontevedra, ocupando el vacío que había dejado Bibiano Fernández Osorio-Tafall tras su nombramiento como subsecretario de Gobernación .

Todos ellos pagaron muy cara su fidelidad a la República. Botana fue fusilado, igual que el hijo de José Araújo; Couto sufrió prisión e incautaciones económicas; Portela Valladares murió en el exilio y García Filgueira estuvo escondido hasta 1949.

El acto del sábado, organizado por la Concejalía de Patrimonio y Memoria Histórica, da continuidad a los celebrados en años anteriores en las parroquias de Salcedo y Lérez y además de homenajear las personalidades más relevantes, reconoce la labor de toda la gente humilde de la parroquia que sufrió directa o indirectamente la represión.

Como siempre, habrá un recuerdo especial para las mujeres, las más olvidadas de entre las víctimas. Se hablará de las que sufrieron la represión directa, como la compañera de García Filgueira, Emma Mourón, que fue encarcelada con Carlos, su hijo más pequeño; como Otilia Meis, también encarcelada tras el asesinato de su padre, Ramón Meis; o como Saladina y Pérsida Riveiro Tomé, Maruja Fortes, Argentina Villaverde, Olivia Tomé o Celia Reboredo, algunas de las mujeres rapadas de la parroquia.

Pero además, se homenajeará a aquellas que, sin sufrir este tipo de agresión directa, se vieron obligadas a convivir con el represor tras el asesinato del marido o durante su encarcelamiento. Mujeres como Isolina Villaverde, viuda del cantero Aurelio Torres, que sufrió numerosos registros e incautaciones económicas y que, tras el asesinato de su hombre en Carabelos, siguió adelante sola y viviendo a pocos metros de la mujer que lo había delatado.

PALABRAS Y MÚSICA CONTRA EL OLVIDO

Tanto sus historias individuales como la represión colectiva que supuso la quema en agosto de 1936 del local de la Sociedad de Agricultores, la "Casa do Pobo", están recogidas en una publicación elaborada por el equipo del programa "A memoria das mulleres" de la Concellería de Patrimonio, que será entregada gratuitamente a todas las personas que asistan al acto.

Intervendrán en él María Lores, nieta de Aurelio Torres e Isolina Villaverde; Xosé Álvarez Castro, el historiador que sin duda más conocimiento tiene de la represión sufrida por la parroquia; Montse Fajardo, responsable de la publicación que se repartirá en el homenaje; y Luis Bará, concejal de Patrimonio y Memoria Histórica. Además habrá actuación musical del grupo Foula.

El colofón del homenaje será el descubrimiento en la escuela de Cons de un panel con los datos más relevantes sobre la represión en Mourente. Tanto ese texto como el de la publicación fueron elaborados gracias al trabajo previo de Álvarez Castro y a la colaboración de dos docenas de personas de la parroquia, la mayoría pertenecientes a familias represaliadas, que prestaron su testimonio y que el sábado estarán en la antigua escuela. Sin su memoria, sería imposible el reconocimiento que toda la sociedad de Pontevedra le rendirá a la Mourente republicana.