Sin mejillón en la Ría de Pontevedra por la toxina diarreica
Por Redacción
La toxina diarreica o DSP vuelve a provocar el cierre de todos los polígonos mejilloneros de la Ría de Pontevedra. Son más de 230 las bateas afectadas por este nuevo parón. Según las analíticas realizadas por el Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar), esta toxina, que ya había obligado a prohibir la extracción entre finales de agosto y principios de septiembre, ha vuelto a reaparecer en los polígonos pontevedreses.
Se trata, según el sector, de un episodio considerado como normal en esta época del año. Además de los polígonos denominados Portonovo A, Portonovo B y Portono C, situados entre Combarro y Portonovo, más en el interior de la ría, la toxina ha obligado a cerrar los polígonos de la orilla sur, los situados en Aldán y Bueu.
Esta situación se ha extendido también a parte de los polígonos de la ría de Vigo. Aunque con una peculiaridad. Los tres parques cerrados, dos en Cangas y otro en Vigo, son los que están situados en la zona intermedia de la ría, mientras que los dos polígonos situados a su entrada, los denominados Cangas C y Cangas D, que suelen ser los primeros en sufrir los efectos de la toxina, continúan abiertos.
Por el momento, la toxina DSP no ha hecho su aparición en la Ría de Arousa. Allí tan sólo se mantiene cerrado a la extracción el polígono ostrero de O Grove.
Los mejilloneros aguardan que, como es habitual cada año, este episodio continúe durante un par de semanas. Calculan que podrán volver a faenar en noviembre, a tiempo para abastecer el mercado de cara a la campaña navideña, que suele proporcionarles gran parte de sus beneficios anuales. Con todo, el sector recuerda que el mejillón que está en el mercado cuenta con todas las garantías sanitarias.