Ponte Caldelas reparará los más de treinta parques infantiles del rural
Por Redacción
El gobierno municipal de Ponte Caldelas puso en marcha un plan integral de reparación de los parques infantiles que tiene repartidos por las parroquias del rural. Los dos parques que hay en Silvoso fueron los primeros en ser puestos a punto pero se va a actuar en los más de treinta que existen en todo el municipio.
El Concello explica que ya había realizado algunas reparaciones durante los tres primeros años de mandato, actuando sobre algunos de los parques más deteriorados.
Una vez enderezada la economía municipal, los presupuestos incluyeron varias partidas para obras de mantenimiento, entre ellas una destinada específicamente a los parques infantiles, con una dotación de 35.000 euros.
Esta previsión permitió la adjudicación de un contrato para su mejora integral. Se trata de la primera vez que Ponte Caldelas acomete una revisión de estas características.
Andrés Díaz, acompañado por el teniente de alcalde, Enrique Vidal, visitaron las obras realizadas en Silvoso de Arriba -donde el parque incluso estaba cerrado y precintado por seguridad ante su mal estado- y Silvoso de Abaixo.
En ambos se realizó una actuación en profundidad para tratar los elementos metálicos y de madera, eliminando todo tipo de defectos. Además se repusieron las piezas y elementos que faltaban y se procedió a un pintado y a una limpieza general.
El alcalde explicó que comenzaron por Silvoso porque es uno de los lugares con más niños, especialmente de la parroquia de A Ínsua, pero las obras irán recorriendo la totalidad de las áreas infantiles para acabar así con su estado de abandono.
Andrés Díaz recalcó las dificultades legales que entrañan este tipo de obras, toda vez que los parques del rural se sitúan sobre terrenos de las comunidades de montes que no están incorporados al patrimonio municipal.
Hace algunos años, explicó, la normativa no era tan estricta y se hicieron parques en este tipo de suelo, pero ahora la ley prohíbe hacer inversión nueva sin previa certificación de la titularidad municipal. Ante este inconveniente, hay que limitarse a obras de mantenimiento, sin que sea posible instalar nuevos juegos.