Aunque de apellidos castellanos, sus árbol genealógico es totalmente gallego, tanto por parte de Serafín como por Margarita. Le pasa casi diez años a su hermana Ana, a la que admira, de la que se emociona hablando y a la "que le daba bastante caña" años atrás. Caña también le daba a la primera cadena de música que le regalaron en la infancia. Etapa en la que además, comenzó a tocar el saxofón.
Entrando en la parte más personal, afirma que ha tenido la gran suerte de enamorarse de su mejor amiga, Marta, a la que conoció en el partido durante su etapa política como concejal del Partido Popular. Unos años que aunque no terminaron con salida por la puerta grande, ha tenido la sabiduría de cerrar con el aprendizaje de la experiencia. Sigue disfrutando del camino Pablo.