Sale del laboratorio un "supermejillón" más resistente a las mareas rojas
Por Oskar Viéitez
Una investigación coordinada por científicos del Centro de Investigaciones Marinas de Vilanova de Arousa y de la facultad de Veterinaria de Lugo descubrió que es posible crear mejillones que acumulen menos toxinas procedentes de las mareas rojas.
En el marco del proyecto Epitox, mediante selección genética, lograron un "supermejillón" que es capaz de reducir la presencia de las tóxinas a niveles inferiores a los perjudiciales para la salud humana.
La revista Aquaculture publica este trabajo que muestra que es posible reducir el impacto de las toxinas complementando o reemplazando la semilla silvestre con la producida en un criadero.
Una de las conclusiones de este trabajo es que los mejillones más grandes y más blancos parecen acumular menos toxinas.
NI SON MAREAS NI SON ROJAS
La conocida como marea roja no es tal, ni es una marea ni es siempre roja. La también llamada purga de mar es un afloramento marino de algunas algas microscópicas que crecen en las rías gallegas.
Bajo determinadas condiciones ambientales, con cambios de temperatura o de corrientes, se produce un fenómeno biológico natural elevándose la presencia de fitoplancton que tiñe el agua del color de los pigmentos que estos organismos utilizan para hacer la fotosíntesis. Mayoritariamente son rojos, pero los hay también pardos, anaranjados o verdes.
Algunas microalgas tienen toxinas. Las más habituales en las aguas gallegas son las del género Dinophysis, conocidas como toxinas diarreicas. Algunos moluscos y crustáceos, como la vieira o mejillón, entre otros, filtran el agua y las toxinas, que se fijan en su organismo y pueden causar problemas de salud de las personas en caso de ser consumidos.
Antes de la creación de los mecanismos de control, hubo también casos de intoxicación amnésica y paralizante.
PROYECTO REMEDIOS
Investigadores de la Universidad de Vigo, el Instituto Español de Oceanografía y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas desarrollan el proyecto científico Remedios que tiene como finalidad determinar el papel de la turbulencia en el crecimiento del fitoplancton tóxico que provoca las mareas rojas en las rías gallegas.
El estudio, financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad arrancó a comienzos de 2017 y se desarrollará hasta finales de 2019.