Los técnicos de la Deputación están sorprendidos por los resultados que están ofreciendo algunos composteros como el del campus de Pontevedra. Los maestros composteros presumen con orgullo del primer compost obtenido en la universidad, que marca un récord de producción en menos tiempo y más calidad.
El tiempo de producción no llega a los tres meses. En este compostero se recogieron 5 toneladas de biorresiduos, serán 20 al finalizar el año, una capacidad de sobra para atender las necesidades generadas por las cafeterías-restaurantes universitarios. El índice de nitrógeno biológico ha llegado al 7% (para hacer un compost de calidad se esperan índices del 2%).
"De toda a bibliografía que hai estamos vendo cousas raras", señaló el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, al comprobar junto al vicepresidente de la Deputación, César Mosquera, como la temperatura que mantienen los composteros es inusitadamente alta, con elevados niveles de nitrógeno "cousas que non están descritas, todavía".
Entre otros factores que contribuyen a este resultado está el "buen comportamiento de los aportadores", la involucración de la comunidad universitaria y el trabajo desarrollado por Quique, el maestro compostero.
Estas experiencias piloto están dando una base de aprendizaje para que las instituciones universalicen este tratamiento de los residuos en los barrios y el rural.
"A clave é ir facendo as cousas con calma e boa letra", resumió Mosquera. Esa es la explicación al éxito que está teniendo este programa que está desbordando las previsiones iniciales de la Deputación.