Entregan a Protección Civil trajes especiales para luchar contra los nidos de avispa velutina
Por Oskar Viéitez
Las agrupaciones de Protección Civil de O Grove, Marín, Moraña, Ribadumia, Vilaboa y Vilagarcía de Arousa recibieron trajes específicos para la lucha contra la avispa velutina en una jornada formativa organizada por la Academia Gallega de Seguridad Pública.
Además de la formación es importante contar con equipaciones idóneas, para que estos grupos de emergencias puedan ofrecer un servicio óptimo a la ciudadanía.
Gracias a estos trajes se puede llevar a cabo con seguridad la destrucción y retirada de nidos de la velutina en los municipios donde esta especie esté actuando o se la prevé un posible avance.
1.697 NIDOS RETIRADOS EN LA PROVINCIA DE PONTEVEDRA
La Consellería de Medio Rural retiró o inactivó el pasado año más de 5.600 nidos de esta especie en 170 concellos de toda Galicia. En nuestra provincia, se retiraron 1.697 nidos, a los que habría que sumar los intervenidos por otros agentes, como asociaciones apícolas, concellos o parques de bomberos, con el que el número llegaría a cerca de 8.000 actuaciones en toda Galicia.
Además, la Xunta entregó el pasado mes de febrero 1.200 trampas comerciales y botes de líquido atraente a los apicultores con asentamientos localizados en concellos en los que se detectaron nidos de esta avispa. Y se está reforzando este reparto a lo largo de la primavera, período en el que las reinas de esta especie salen de la época de hibernación.
Cuando un ciudadano localiza a uno de estos nidos tiene que llamar al 012 para alertar de su presencia, dando la localización más exacta del mismo y su descripción de cara a que los servicios de emergencia puedan confirmar si se trata o no de un nido de esta especie, que son grandes y redondos, están colgados en zonas altas y son de color amarillo.
Las avispas son grandes también, con patas amarillas y cabeza y tórax oscura casi negro, explicó por su parte uno de los ponientes de la jornada de hoy, Juan Luis López Seoane, de Tragsatec, quien añadió que se considera situación de riesgo cuando los nidos aparecen en viviendas habitadas, en establecimientos singulares como escuelas, iglesias o hospitales, y en lugares de paso de población.