El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, ha achacado a disputas localistas "sen base ningunha" la demanda que están impulsando varios municipios de la comarca de O Salnés para que la sede del Consello Regulador da Denominación de Orixe Rías Baixas, situado desde hace más de una década en el pazo de Mugartegui, se traslade a Cambados -como cabecera de la principal zona de producción-.
"Cando non hai nada que facer aparecen estas disputas localistas que non teñen base ningunha", afirmó este miércoles el regidor capitalino en rueda de prensa. Esta propuesta, dijo, "parte dun erro inicial" y es que la sede de este organismo "sempre estivo en Pontevedra", en donde el Concello puso a su disposición un "emblemático" pazo del siglo XVIII "correndo con todos os gastos".
Fernández Lores reiteró que la mejor situación para el Consello Regulador es Pontevedra como capital de las Rías Baixas y porque está "equidistante" con todas las subzonas de producción, al recordar que los vinos de esta denominación también tienen un gran peso áreas del sur de la provincia como Val Miñor o Condado-Paradanta.
Además, aprovechando este asunto, el alcalde volvió a exigir que se amplíe la denominación de origen Rías Baixas a otros concellos que se quedaron fuera por una "cacicada sen sentido que ven da época de Manuel Fraga". Así, recordó la existencia de unos estudios técnicos que avalan la entrada de bodegas de Poio, Vilaboa, Pontevedra o Ponte Caldelas, que cuentan con viñedos "que teñen as mesmas condicións que o resto".
En todo caso, Miguel Anxo Fernández Lores destacó que esta DO "ten futuro" porque se trata de un vino de "alta calidade" y sobre el que existe un "gran interese", pero rechazó que se abra un debate sobre la situación de la sede del Consello Regulador "que non ten sentido".
La petición para que se traslade a Cambados este organismo parte de una moción aprobada el pasado verano en el pleno municipal de este municipio. Sus impulsores proponían recabar apoyos en el resto de ayuntamientos de la denominación. Vilanova de Arousa fue el primero en sumarse y se espera que, en breve, se debata en A Illa, Ribadumia, Meis, Meaño, Vilagarcía y demás concellos de O Salnés.
La intención es, una vez se hayan manifestado todos estos concellos, dirigirse a la Xunta de Galicia y al propio Consello Regulador para retomar el debate sobre este asunto.