El BNG traslada a la Cámara parlamentaria gallega la situación en la que se encuentra el Parque arqueológico rupestre de Campo Lameiro para solicitar al gobierno de la Xunta de Galicia que asuma la gestión directa deste espacio.
Con esta propuesta, la formación nacionalista busca quese evite la concesión a empresas privadas de la gestión del Parque y que se seleccione al personal a través de un concurso público, al mismo tiempo que se dota de recursos técnicos y humanos este enclave.
La portavoz en Cultura, Ana Pontón, y la portavoz en Bruselas, Ana Miranda, visitaron el parque para comprobar los desperfectos provocados en algunos petroglifos cuando se realizaba una labor de desbroce. Según Ana Pontón, la explicación dada por la Xunta ante este caso fue "insuficiente" porque no hizo pública la información ni cumple con la Lei de Patrimonio Cultural de Galicia que prevé sanciones de hasta 60.000 euros en supuestos como éste.
Entienden desde el BNG que el servicio que se ofrece en la actualidad es deficiente y no está a la altura de las necesidades de este parque, desaprovechando un potencial relevante en lo cultural, turístico y de investigación.