Ya era conocido que el Concello de Pontevedra había encargado a Sergio Portela la creación de un conjunto escultórico en recuerdo de los fusilados el 12 de noviembre de 1936. Se instalará en breve en la plaza José Adrio, conocida popularmente como la ⿿pasarela⿿. Pero hasta ahora nadie había verbalizado el malestar que, aparentemente, existe entre algunas de las familias de las víctimas ante esta actuación.
Lo hizo este jueves el concejal Luis Bará, quien criticó abiertamente el proyecto impulsado por el grupo municipal socialista. Más allá de valorar la escultura en sí o la estética que tendrá, el edil nacionalista lamentó que no se haya consultado con las familias este asunto. "Boto de menos que se contara máis coas familias", dijo. Aseguró haber recibido quejas o muestras de malestar por algunas de ellas "porque non saben nada desta homenaxe".
Bará entiende que aún se está a tiempo de solucionar este "olvido" y cree que "sería de agradecer". Especialmente porque también el motivo elegido para la estatua, que incluye un ángel, "pode xerar algún tipo de malestar".
Con respecto a esta denuncia pública, Antón Louro lamentó que su compañero en el gobierno municipal utilice la memoria histórica "para un fin partidista". Negó que no se haya hablado con las familias, aunque reconoce que "evidentemente no con todas, senón coas que actúan como portavoces deste colectivo"; pero reiteró que se trata de un monumento cívico y que "non ten base relixiosa algunha".
El portavoz socialista señaló que este conjunto escultórico está "en fase de realización", lo que ha provocado el retraso del acto de homenaje que, anualmente, se celebra el 12 de noviembre para recordar la memoria de estos represaliados.
Precisamente, tras realizar estas declaraciones el PSdeG-PSOE anunció que este viernes el escultor Sergio Portela presentará públicamente el diseño del monumento que recordará a los fusilados en 1936. Será en una presentación en la que estará también Antón Louro.