Llevan más de tres décadas en constante crecimiento y expansión nacional e internacional y cada año reciben cerca de 200 premios en los certámenes más prestigiosos del mundo. Hablamos de los vinos D.O. Rías Baixas con su rey, el Rías Baixas Albariño, a la cabeza; el blanco favorito en Galicia, y cada vez más en Nueva York, Londres, Tokio o Berlín. ¿Cuál ha sido su secreto?
La calidad y el prestigio de los vinos de Rías Baixas es reconocida desde hace décadas dentro y fuera de España y sigue creciendo en ventas y en la conquista de nuevos mercados. Este caso de éxito empezó a forjarse hace apenas 37 años, cuando bodegas y viticultores de toda la provincia se unieron y crearon el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rías Baixas con el objetivo común de convertir las uvas autóctonas cultivadas en pequeñas parcelas en vinos de la máxima calidad, capaces de sorprender al mundo.
Los vinos de Rías Baixas son vinos frescos, afrutados, largos en boca, salinos, con un marcado origen atlántico y una acidez equilibrada que gustan cada vez más y armonizan con todo tipo de platos y gastronomías. Son el mejor aval para la intensa y exitosa promoción desarrollada en estas tres décadas largas y una garantía de futuro.
Y es que las tendencias internacionales en el consumo del vino soplan a favor de un producto muy de aquí y demuestran que la defensa de lo auténtico ha sido la mejor de las estrategias que podían desarrollar bodegas y viticultores, con un éxito rotundo que se confirma año a año.
Vinos blancos y espumosos, en crecimiento
Es una tendencia lenta pero segura en todo el mundo; el consumo de vino tinto retrocede y el de blanco y espumoso crece. Según un estudio de la Organización Internacional del Vino y la Viña (OIV), el consumo mundial de vino tinto ha caído un 15% en los últimos 17 años. Mientras, el consumo de vino blanco ha crecido un 10% desde 2000 y alcanzando una cuota de consumo mundial del 42,2%. ¿Y los espumosos? Este tipo de vinos que cada vez más bodegas de la D.O. Rías Baixas elaboran son muy demandados y ya no solo en celebraciones, sino como maridaje de aperitivos o de toda una comida, desde el entrante al postre.
Vinos frescos
Si algo define al Rías Baixas Albariño y a los vinos de la D.O. Rías Baixas es su frescura. Esta cualidad es altamente buscada por el consumidor de vino de hoy en día que prima vinos con una experiencia de consumo ligera y refrescante. Los Rías Baixas blancos (y también los tintos) cumplen y por eso combinan con toda clase de gastronomías y son perfectos en cualquier momento del año. Las distintas elaboraciones de vinos D.O. Rías Baixas presentan una gama enorme de perfiles aromáticos y matices diferentes que triunfan tanto en Cambados como en República Dominicana.
Origen y diversidad
El consumidor de vino actual quiere no solo disfrutar de un vino sino de su origen. La diversidad de variedades de uva autóctonas (14 en total), subzonas y parcelas de minifundio extremo en las que se divide la D.O. Rías Baixas permite elaborar vinos muy diversos y de origen muy marcado, que hablan del territorio y captan como pocos el entorno en el que se desarrollan. Y como buena uva autóctona, la Albariño crece aquí mejor que en ningún otro sitio, dando como resultado vinos de gran calidad, que trasladan en cada sorbo el clima, la orografía, la luz, el mar de las Rías Baixas... Por eso el Albariño Rías Baixas es único y con mucho más carácter que cualquier Albariño elaborado en otro lugar del mundo. Y conocer este lugar solo puede hablar a favor de sus vinos.
Enoturismo
La cultura del vino se expande cada vez más y alcanza a un público diverso y amplio. El enoturismo marca tendencia con planes para descubrir los procesos de producción del vino, la historia y la conexión con el territorio. Pero pocas zonas vitivinícolas reúnen un paraíso como las Rías Baixas, con viñedos al pie del mar o en entornos fluviales únicos, bodegas localizadas en impresionantes pazos o con inmejorables vistas, las mejores y más diversas playas, un patrimonio histórico y natural impresionante y una gastronomía extraordinaria. La Ruta do Viño Rías Baixas fue pionera en España y ha sido ampliamente reconocida como las mejores del país. Pero lo mejor es que no hay aficionado al vino o profesional vinculado a este mundo que no acabe maravillado tras su visita a la D.O. Rías Baixas.
Sostenibilidad
La apuesta por las bodegas que priorizan el cuidado de la naturaleza en su producción es una tendencia al alza. La viticultura tradicional a la que estamos acostumbrados en Rías Baixas, con poda y vendimia manual, es poco frecuente en otros territorios y es más respetuosa con la vid y con el terreno. La reutilización de los restos de vendimia, poda y elaboración; los sistemas de conducción tradicionales como la parra, la apuesta creciente de las bodegas por reducir tratamientos fitosanitarios en los viñedos y buscar alternativas sostenibles son algunos ejemplos en la D.O. Rías Baixas. Pero la sostenibilidad va aquí más allá de lo ambiental, también implica lo social y lo económico, donde el vino es un catalizador de riqueza y empleo en el ámbito rural e implica a más de 5.000 familias y casi 180 bodegas.
Un vino único, un Blanco Como Ninguno
Los vinos de Rías Baixas atraen cada vez más miradas e interés también de los importadores y consumidores de diferentes zonas del mundo a los que apasiona conocer todo lo que hay detrás de cada copa, un territorio y una forma de entender la vitivinicultura totalmente diferencial, que nos define y nos permite elaborar vinos únicos, como el Albariño Rías Baixas, un Blanco Como Ninguno.