Todas las hipótesis abiertas sobre la muerte de Manuela Barbosa, localizada tres años después en una finca de Arcade

Soutomaior
08 de julio 2024

El  caso se ha judicializado en los juzgado de Redondela. La Guardia Civil mantiene abierta la investigación y en los últimos días han tomado declaración a los vecinos de la zona del barrio de O Conde. Las investigaciones no han permitido determinar si fue una muerte accidental o resultado de una acción homicida

Ana y Raquel, las hijas de Manuela Barbosa, pegan carteles en Pontevedra
Ana y Raquel, las hijas de Manuela Barbosa, pegan carteles en Pontevedra / Cristina Saiz

La Guardia Civil mantiene abierta la investigación para aclarar la muerte de Manuela Barbosa, la vecina de Redondela desaparecida en 2021 cuyos restos óseos fueron localizados el pasado 18 de junio en una finca de Arcade, en Soutomaior. 

Transcurridas casi tres semanas tras el hallazgo de los restos óseos, los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil continúan con las indagaciones y en los últimos días han tomado declaración a los vecinos de la zona del barrio de O Conde, donde fueron localizados. También se han entrevistado con familiares y allegados de la mujer. 

De momento, todas las hipótesis están abiertas y la Guardia Civil no confirma ni descarta nada sobre las circunstancias en las que falleció esta mujer, que cuando desapareció tenía 66 años. Así, las investigaciones realizadas hasta el momento no han permitido determinar si fue una muerte accidental o resultado de una acción homicida.

Fuentes oficiales de la Guardia Civil confirman que siguen investigando y se limitan a asegurar que "no descarta nada".

En estos momentos, la investigación está centrada en intentar determinar los últimos movimientos de esta mujer y también si el lugar de la muerte fue la misma finca de Arcade en la que aparecieron los huesos o en otro lugar

Manuela Barbosa desapareció en julio de 2021 tras acudir a visitar a su hija en Arcade y sus restos fueron localizados a apenas 200 metros del domicilio de su hija, de modo que esta circunstancia podría encajar con la posibilidad de que falleciese ya ese mismo día, tras abandonar la vivienda.

En las inmediaciones de la zona donde se encontró gran parte del esqueleto apareció la cartera de esta mujer, en la que había varias fotografías de la fallecida. También se encontraron efectos personales de su propiedad, entre ellos, algunas joyas que llevaba el día de su desaparición. 

Los huesos fueron localizados por un operario que estaba realizando un desbroce y una limpieza en profundidad de la finca. No había parecido hasta ahora porque este terreno llevaba tiempo cubierto de maleza, una circunstancia que, en palabras del subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, "contribuyó a que no se localizara antes el cadáver".

La investigación está tratando de determinar si desde la desaparición de Barbosa se había realizado alguna limpieza justo en esa zona, pues algunas informaciones vecinales apuntan a que se realiza una limpieza anual en la finca

Tras la localización de los restos, acudieron al lugar agentes del Laboratorio de Criminalística de la Policía Judicial de la Guardia Civil y los servicios especializados de la propia Guardia Civil y el caso se ha judicializado en los juzgados de Redondela