Una representación de la Plataforma de Afectados por la autovía A-57 ha visitado el Arctic Sunrise de Greenpeace, en el puerto de Vilagarcía, para "unir fuerzas en la defensa del medio ambiente y la lucha por proteger los ecosistemas fluviales y marinos".
Personal del barco rompehielos recibió a los vecinos de Bora y Xeve y mostró las peculiaridades de la embarcación, que surca los mares para concienciar sobre la necesidad de proteger los océanos. Tras la visita, se desplegó en el buque la pancarta de la campaña "Salva o Lérez" para conseguir que la Audiencia Nacional paralice la construcción de los tramos pendientes de la autovía que destruirá Red Natura y supondrá vertidos al río que acabarán en la ría de Pontevedra.
Greenpeace y su coordinador en Galicia, Manuel Santos, colaboran con la Plataforma de Afectados por la autovía A-57 que cuenta además con el apoyo de Ecoloxistas en Acción, Amigas da Terra y Adega, que impulsa la campaña judicial contra la vía.
Los colectivos ecologistas se oponen a esta infraestructura que prevé la construcción de un viaducto de 750 metros que cruzaría el río Lérez y que supondría daños irreversibles a la flora y la fauna de la ribera del cauce.
Según informan desde la Plataforma "numerosos estudios internacionales acreditan que el rodamiento de los coches en el asfalto desprende sustancias plásticas de los neumáticos que se depositan sobre la calzada". Tal y como explicó recientemente el medioambientalista Antón Lois, de Amigas da Terra, "en el caso del viaducto sobre el Lérez, estos microplásticos acabarían en el lecho del río y, posteriormente, en la ría de Pontevedra por el arrastre de las lluvias".
Los afectados recuerdan que la Declaración de Impacto Ambiental, publicada el 26 de mayo del 2023, reconoce que, "durante la fase de construcción del tramo Bora- Xeve, se podrían producir vertidos de las obras al cauce". "Los propios técnicos de los informes oficiales acreditan los daños que esta vía causaría al ecosistema fluvial y marino", añaden desde la Plataforma de Bora y Xeve.
"La construcción de esta infraestructura sería letal para los mejillones de río detectados por biólogos y expertos en la zona del Lérez donde se prevé la construcción de los pilotes del viaducto", añaden los portavoces de los afectados en un comunicado. "Si las obras de la A-57 se llevan a cabo, podrían suponer la muerte de esta especie (Margaritifera margaritifera) que era muy abundante hace un siglo en el noroeste español y que está en riesgo extremo de extinción en Europa por la contaminación de las aguas" y aseguran que "también se pondría en riesgo la presencia del Desmán Ibérico, propio de ecosistemas fluviales y que está desapareciendo en todo el país".