El Entroido de Pontevedra cumple en 2024 cuarenta años desde que las comparsas y disfraces volveron a las calles, un aniversario que bien vale de excusa para contagiarse del espíritu de esta festividad más allá de las condiciones meteorológicas.
Porque Pontevedra, como recodaron en su intervención los pregoneros de este año, "contra vento e marea celebra o Entroido".
Y es que todos miran al cielo para ver si el carnaval puede completar su extensa y divertida programación, pero al menos lo que no ha podido evitar la lluvia es el inicio de los festejos con el tradicional pregón y la llegada del Rey Urco a la ciudad, acompañado de varias comparsas. Un pistoletazo de salida a la semana festiva que siguió numeroso público desde la Praza da Ferrería aprovechando una breve tregua ofrecida por el clima.
"Por fin parou a chuvia", afirmaba Urco deseando que "esta semana aguante" y antes de dar una orden a los pontevedreses: "Todo o mundo a disfrazarse e a pasalo ben".
Tras su intervención llegaba el turno de la agrupación encargada este año del pregón del Entroido, que no era otra que la 'Murga do Naveiro', en su décimo aniversario como participante del Entroido pontevedrés.
"É tempo de provocación e desacato, de festa", afirmaban apelando al espíritu crítico y humorístico de estas fechas y animando "sobre todo a que non haxa medo e que poidamos expresarnos como nos dea a gana".
La Murga do Naveiro, como no podía ser de otra forma, se animó a cantar unas coplas sobre los 'pellets', el triatlón o los planes de Zara para su nueva tienda en la ciudad, reivindicando la importancia de un certamen en el que "queremos máis murgas pontevedresas, así que collede o caixón e a guitarra e animádevos a participar", señalaron.
Unos versos con los que inaugurar un Entroido que sigue mirando al cielo y que desea poder salir a la calle este sábado con el tradicional desfile a partir de las 17.00 horas.