Dentro de la estrategia de la plataforma de explicar las afecciones y problemas que supondrá la construcción del segundo tramo de la A-57, vecinos de Bora y Xeve se han reunido este lunes por la tarde con el vicepresidente de la Deputación de Pontevedra, Rafa Domínguez, en la sede provincial.
La plataforma ha iniciado una ronda de contactos con todos los partidos y cargos relevantes para pedir que se busque un mejor trazado para esta vía.
Sostiene que el trazado actual "cambiará para siempre el rural de Pontevedra, dejando a decenas de vecinos sin casas, otros cientos de viviendas quedarán pegadas a los taludes y cerca de 200 residencias soportarán niveles de ruido por encima de lo permitido".
"El trazado del Ministerio de Transportes destruirá 6,000 metros cuadrados de Red Natura y dividirá a las parroquias", añaden.
Los portavoces de esta plataforma han trasladado todas estas cuestiones a Rafa Domínguez para que defienda los intereses de los vecinos del rural afectados por esta "lesiva e innecesaria vía".
Para este jueves esta plataforma de afectados ha convocado una rueda de prensa en el edificio de la Xunta en Benito Corbal junto a los colectivos Amigas da Terra, Ecoloxistas en Acción y Greenpeace para denunciar los graves impactos sociales y ambientales que tendrá en el rural pontevedrés la construcción de más tramos de esta infraestructura.
El rechazo del vecindario del rural pontevedrés a esta autovía comenzó hace 20 años cuando se licitaron los primeros tramos. Ahora, ante a continuación de la construcción, Amigas da Terra, Ecoloxistas en Acción y Greenpeace muestran su apoyo y solidaridad con el vecindario de las parroquias de Bora y Marcón "para frenar el destrozo ecológico y social que causarán estas obras".