Las señales que identificarán toda el área urbana de Pontevedra como zona de bajas emisiones comenzarán a instalarse "o antes posible", según ha explicado este martes el edil de Mobilidade, César Mosquera, que ha presentado el diseño que tendrá esta señalización.
El Concello ha tenido que modificar ligeramente el modelo propuesto a instancias de la Dirección General de Tráfico (DGT), el organismo que debía autorizar estas señales.
Tras diversas "evolucións" en los últimos meses, la DGT ha dado el visto bueno al diseño propuesto desde Pontevedra, que proponía inicialmente un fondo naranja para identificar estas zonas, pero finalmente será blanco para seguir la línea que marca este organismo.
La señal, que será de forma rectangular y vertical, incluye un coche con la emisión de gases, que indica que los vehículos que no sean "tráfico necesario" o servicios no tendrán autorizada la entrada en estas zonas de bajas emisiones.
Este distintivo, que prioriza el uso de la lengua gallega, incluirá también estas instrucciones en otros tres idiomas: castellano, inglés y portugués.
Mosquera ha señalado que se colocarán las señales "que sexan necesarias" pero añadiendo que serán las "mínimas" para evitar llenar toda la ciudad con esta señalización.
El Concello tiene la obligación legal de colocar estas señales, pero sostiene que "na práctica" no supondrá cambio alguno para los conductores porque toda la ciudad de Pontevedra "xa é unha zona de baixas emisións" y se optará por seguir reduciendo tráfico en algunas zonas.
Entre ellas, Mosquera ha identificado un tráfico "elevado" en zonas como Eduardo Pondal o Echegaray, si bien en ambas "xa baixou bastante". En Colón, ha dicho, es "asumible".