¿Cómo os encontráis, amantes del arte? Os veo de contento, pero tranquilos. Las tapitas estarán dispuestas después de las 12 horas. Sé que alguno ya reservó mesa. ¡Sí! Es la Plaza de La Leña. Ya comentaremos su historia y leyendas.
En esta vuestra ciudad guarda preciosos vestigios del barroco. Hemos visitado la Plaza de la Pedreira, el convento de los Jesuitas, y encontraremos más edificios con tintes barrocos.
Hoy vamos a comentar el Pazo de García Flórez. Observamos sus columnas barrocas; es un edificio de gran belleza. En el tejado observamos dos estatuas, llamando la atención hacia su feudo.
Encontramos esta referencia. En el siglo XVIII Antonio García Estévez y su esposa Tomasa Suarez Flórez, posiblemente de origen lusitano, mandaron construir este bello pazo, sobre otro anterior ya en deterioro.
¡Menuda casa señorial! Observad el pórtico con soportales de tres arcos, apoyados en columnas dóricas, propias del barroco. En el primer piso y segundo tiene dos puertas que dan paso a los balcones y ventanales. Pincelamos su historia.
¡Observad ese bello escudo! Está coronado con un yelmo, en sus inicios dorado y policromado, rodeado por cinco medallones. En el interior del escudo, dan vestigios de los linajes de familias: Estévez Suarez, Fariña Florez. ¡Es chulo!
Pasados unos años, este pazo fue albergo de varios estamentos.
Desde 1881 a 1930 se convirtió en la sede de la Escuela Normal de Pontevedra. En 1930 se convirtió en Escuela Graduada para Crianzas (Hoy, alumnos de Primaria). El primer piso estuvo la escuela; el segundo para alojamiento del director. Pasados unos años, fue ocupado por la Cámara Municipal de Pontevedra.
En 1940, su interior fue remodelado por el arquitecto Robustiano Fernández Chacón para instalar el museo de esta ciudad. En el exterior, conservando el estilo barroco, construyeron este idílico puente, encima de un arco de piedra; el motivo fue para unirse con el pazo de Castro Monteagudo. ¡Tranquilos! Lo comentaremos.
El 15 de agosto de 1943 fue inaugurado como sede del museo de Pontevedra; las salas de este museo fueron abiertas al público el 4 de septiembre de 1946; la reconstrucción del gabinete de la fragata Numancia, fue inaugurada el día 7 de septiembre del 1946.
¡Un memorando a un gran marino pontevedrés! ¡Casto Méndez Núñez! Nació en Vigo el 1 de julio de 1824, falleciendo en esta ciudad el 21 de agosto de 1860. A bordo de su buque Numancia, dio la vuelta al mundo en 1867, realizando diversas misiones bélicas.
El 2 de mayo de 1866 se enfrenta a una escuadra naval muy superior a la suya; atacó las fortificaciones del puerto del Callao. Tenía a su mando cinco buques; dos ya estaban averiados y él, herido en su camarote. Hizo subir a todos sus bravos combatientes y, desde las jarcias, gritaron “tres vivas”, e inició su retirada. Pasó a la historia su gran epitafio: “Más vale honra sin barcos que barcos sin honra”.
Una sugerencia de gran profundidad. Le debería hacerla suya la clase política que nos gobiernan: solo piensan en el poder, olvidándose de los grandes problemas sociales, laborales, que sufren nuestros pueblos.
¡Ya estáis de alboroto! Son las once horas. ¡Visitemos e indaguemos sobre el Castro de Monteagudo, que unidos al Pazo de García Flórez, surge un museo que atesora grandes muestras de las etnias que invadieron nuestra Galicia!
Datan la construcción de este pazo en 1760. Se basan en un documento latino, encontrado en su remodelación. Su promotor y propietario fue José de Castro Monteagudo. Fue el primer interventor de la Provincia marítima de Pontevedra.
Este pazo urbano nos desvela su fachada principal a la calle Pasantería; muestra características austeras, con dos ventanales, una puerta central con balcón en la planta superior, puerta de entrada en el centro, con dos ventanas en la planta baja.
¡Espectacular esta belleza del barroco! ¡Ya os veo con más entusiasmo! Observad el coqueto balcón, que se regocija de las tres columnas pétreas que los sostiene. En el observaremos el escudo de esta vuestra ciudad, Pontevedra.
¡Siempre imperan corrientes distintas a cada época! Años posteriores, se ubicó la escuela de niños; en la planta baja, instalaron la tienda La Imperial, luego el restaurante La Flor, finalizando en un taller de carpintería.
En 1928 La Sociedad Arqueológica, presidida por Casto Sampedro, compra este inmueble por 52.000 pesetas a Casimiro Gómez Cobas, su propietario, e instala la primera sede de nuestro museo. Tuvo la colaboración de Castelao. Se abrió al público el 10 de agosto de 1929.
¡Ya comentamos los andares del Pazo de García Flórez! Unido por este hermoso puente, engrandece este museo con la segunda fase.
¡Nos olvidamos de solicitar visita! Os comento lo que atesora. En el Pazo de Monteagudo, alberga colecciones de arqueología, platería prerromana y romana y pintura gótica, renacentista y barroca española, italiana y flamenca de los siglos XV al XVIII. Se exponen pinturas de Pedro Berruguete, Juan Correa de Vivar, Eugenio Cajés y Juan Pantoja de la Cruz , entre otros. Está depositado el tesoro das Silgadas y otros utensilios prehistóricos. Os dejo esta referencia.
En el edificio García Flórez, ya comentamos que está el gabinete de la fragata Numancia y el camarote de Méndez Núñez. Hay diversas esculturas de tipo religioso y piezas del azabache santiagués. Encontraréis otros vestigios. La segunda planta está dedicada a Castelao. En la biblioteca del Monasterio de Poio, la sala dedicada a Castelao está continua a la de Antonio Rey Soto, su mentor y amigo. ¡Nos queda un poco rato! Damos un paseo por la rúa de la Pasantería y nos recrearemos en el duende de estos dos edificios. Preparad vuestras cámaras. Las fotografías son un gran recuerdo.
Pedro de Lorenzo y Macías.
Fotografías: © Sofía Lorenzo Gómez.
FUENTES: María de La Paz Varela Campos, Quintamar Cabello, David Vázquez Barbazán, Antonio López Sánchez. Arqueología en Internet (Madrid: Universidad Complutense de Madrid)
(6 (2)). ISSN 1139-9201.
Guía Acústica Turística ciudad de Pontevedra; Registrada ® Pedro de Lorenzo y Macías.