Pedro De Lorenzo y Macías
El Convento de los Jesuitas: Su historia y herencia. Primera parte
Un pontevedrés, Jorge Andrade, vivió en Perú en el siglo XVII; era sacerdote y obtuvo una gran fortuna. Menciona que en 1644 dona 20.000 pesos de plata; su objetivo fue financiar un colegio en su ciudad pontevedresa para mejorar la educación de sus infantes. El Ayuntamiento dio el visto bueno y potenció la construcción de este “Complejo”, con la finalidad de unificar en el mismo, las escuelas existentes. Fue encomendado a la Orden de los Jesuitas.
Su convento estaba situado en la Calle Sarmiento, muy cerca del antergo portón de Rocheforte de las antiguas murallas de esta ciudad: abría camino hacia el Convento de las Clarisas; hoy, propiedad del concello.
Los Jesuitas ocuparon el colegio desde 1650 hasta 1767, que fueron expulsados de España. Su expulsión fue decretada por el rey Calos III, ya que fueron acusados de potenciar motines populares (1766), conocidos con el nombre de Motín de Esquilache.
Esto nos argumenta que el Padre Sarmiento realizó sus primeros estudios en este convento. El convento se inició en 1650; da a entender que ya iniciaron su labor docente.
Pronto sintieron necesidad de tener iglesia propia; se inició su construcción en 1685 y fue consagrado este templo el 14 de julio de 1714.
Su arquitecto Pedro Monteagudo Piñeiro y Taboada (1633-1700), natural de Cerdedo, inició esta obra barroca.
Referente a la escultura barroca que talló en el Convento de los Jesuitas, se basó en la fachada del Monasterio de San Juan de Poio, regentado por los benedictinos. Surgieron serias controversias; los benedictinos presentaron una demanda que continuó, fallecido Pedro Moneagudo en 1700, contra sus herederos, a los que por el Real Provisión de la Real Audencia del reino (junio de 1700), les reclamaron las deudas pendientes de nuestro paisano de Cercedo.
¡Ya os alborotáis! ¡Claro! Con esos trastos estáis verificando sí lo que hemos expuesto es coincidente. ¡Ya, ya! ¿Quiénes remataron la iglesia de San Bartolomé? Lo que tenemos como cierto es que el arquitecto falleció en 1700. Hay otra versión sobre la inspiración de la fachada. ¡Lo sé! Lo encontrasteis en Google.
Lo que está constatado que Pedro Monteagudo fue contractado para iniciar la iglesia Barroca de San Juan de Poio, siguiendo los planos de Fray Gabriel de Casas (1691). Muerto Pedro Monteagudo en 1700, es posible que siguiesen con las obras Bonet y Fernando de Casas Novoa.
No asevero que hubiese plagio, pero los benedictinos se mosquearon y reclamaron los derechos de su patente. Os invito a analizar las dos fachadas: San Bartolomé y Monasterio de Poio.
Monasterio Mercedario de San Juan de Poio. Iglesia de San Bartolomé.
Nos dice que Pedro Monteagudo realizó el proyecto con los planos de la Iglesia de Gesú en Roma. ¡No entro en polémicas! Se puede entender que parte del convento de los Jesuitas lo planificara, conociendo la Iglesia de Gesú. Todo es posible. Por ello, amigos, debéis seguir con las investigaciones; ayudan a florecer muchas cosas que desconocemos.
¿Quiénes remataron la iglesia? ¡Siempre me enrolláis con líos! Sabemos que se inició en 1696 y finalizó en 1714. Pudieron acabar este templo: Pedro de Mena y Gregorio Fernández.
En su fachada, las 6 grandes columnas dóricas y dos jónicas, las torres y el frontón superior son características del barroco jesuita. Aquí se expone también el blasón de armas de la familia Pimentel y en la parte superior un gran blasón de armas de España en piedra.
¡Ya expulsados los Jesuitas, en 1836 fue declarada parroquia, ya que San Bartolomé El Antiguo estaba muy deteriorado, sito en lugar que ocupa El Casino y El Teatro Principal!
El culto a San Bartolomé fue enorme. Los templarios lo tenían como referente, construyendo en España varios templos en su recuerdo.
Comentaremos su historia en la visita en donde estuvo ubicado San Bartolomé el Viejo.
Fotografía: @TripAdvisor.
Entrando en la Iglesia, a mano izquierda, nos recibe La Virgen de la O, patrona de esta ciudad. Ya comentamos que estuvo en Santa María, iglesia románica. ¿Pudo estar ubicada en San Bartolomé el Antiguo?
Lo siento, amigos. El ómicron nos impide ir a registros, archivos y bibliotecas. Creemos que la imagen pueda proceder de San Bartolomé el Antiguo. Desconocemos en qué fecha fue el inicio de su advocación.
Suponemos que fue entre el siglo XII-XIV. San Bartolomé tiene preso y sujeto con cadenas al diablo. En Agosto se desata y sale con fiereza contenida; le persiguen el sacristán, los monaguillos, que sudan de lo lindo.
Va atemorizando a todos, los que encuentra a su paso; con su tridente, pincha a niños, jovencitas y abuelos. ¡Gran revuelo y regocijo en todos los asistentes!
En PontevedraViva, Óscar Viéitez: “Este jueves O Demo regresó con su séquito a la ciudad del Lérez haciendo disfrutar a los niños con sus correrías. Tras una humareda de "azufre" abandonó la caldera del infierno por la salida que, según parece, se encuentra en los Arcos de San Bartolomé. (23 agosto).
La representación iconográfica del San Bartolomé va unida a dos curiosos aspectos, el de su martirio (le arrancaron la piel a tiras) y el de su presencia junto al diablo (como recoge la imagen del templo parroquial pontevedrés). Fuentes tradicionales narran la expulsión de un demonio llamado "Astaroth" que vivía dentro de la estatua de un templo pagano.
En el año 2001 la Boa Vila recuperó esta tradición recogida en los dibujos de Agustín Portela y asociada a la figura de Dominguiños, un personaje popular del barrio marinero de A Moureira que, a mediados del siglo XX, interpretaba el papel del Demo”.
Amigos, todos somos necesarios. Hoy, nos quedamos con estos relatos.
La próxima semana, vamos a indagar sobre la labor de los Jesuitas y su legado histórico en esta vuestra ciudad.
Pedro de Lorenzo y Macías.
Fotografías: @Sofía Lorenzo Gómez.
Imagen de la Virgen de la O: @tripAdvisor.
FUENTES: Pontevedraviva – Óscar Vieitez.
Guía Acústica Turística ciudad de Pontevedra; Registrada ® Pedro de Lorenzo y Macías.