Tribuna Viva
Asociación de Voluntarios de la Moto de Campo de Galicia
Desde la Asociación de Voluntarios de la Moto de Campo de Galicia, queremos hacernos oír, ya que estas últimas semanas, el colectivo de la moto de campo se ha visto afectado por unas noticias que han salido en prensa y redes sociales, haciendo daño a dicho colectivo, y la razón de este escrito, no es más que aportar el punto de vista de la parte contraria.
Esta asociación ha sido creada para resaltar nuestro compromiso con la sociedad y el entorno natural, con la intención de ser útiles siempre dispuestos a utilizar nuestros recursos para ayudar y colaborar.
No sé cuál es el motivo, quizás el Covid que al cerrar bares hay mucha más gente por el monte, o que el confinamiento perimetral hace que mucha gente que se desplazaba a Portugal u a otros sitios con sus motos, no puedan hacerlo y lo hagan alrededor de casa, lo que lleva con esto, una masificación del monte….demasiadas motos, bicicletas, paseantes, gente a caballo, etc, se ven últimamente.
La venta de motos de campo está autorizada por el gobierno, ¿Por qué no se nos permite usarlas? ¿por qué somos los malos del monte?.
Mantenemos abiertos los caminos en invierno para que se hagan transitables porque en invierno, no suele ir nadie al monte.
Dejamos muchos euros en ellas (sobre 9.000 euros que cuestan nuevas),además de accesorios, repuestos, equipaciones, gasolina, seguros, impuestos de circulación, itvs, comidas en los bares de los pueblos, etc.
En todos los colectivos, siempre hay quien hace cafradas o va de ilegal, pero no en todos los grupos (salvo en la moto de monte), se generaliza.
Porque un pescador sea ilegal, no prohíben la pesca o persiguen a todo el colectivo. Porque haya gente haciendo el cafre con el coche poniendo vidas en riesgo, no prohíben ni coches ni carreteras. Porque un cazador haga una cafrada….no juzgan a todo el colectivo. Pero si dos motos de monte hacen el indio….no son Pepe y Juan, o dos motoristas…no….los de las motos de monte es como se diría y ahí, entra todo el colectivo.
El monte es nuestra zona de esparcimiento, viajes, paseos (no todos se dedican a competir) y en todo momento lo respetamos.
Tanto yo como los grupos con los que salgo al monte, tenemos respeto por los demás: Si nos encontramos a alguien en un camino, pasamos en primera velocidad, sin levantar polvo y saludamos o paramos a charlar. Si un camino no tiene salida, damos vuelta, no cruzamos fincas. Si viene alguien a caballo, apagamos las motos hasta que pase. Si nos cruzamos con ciclistas, bajamos a primera velocidad, despacio, sin levantar polvo y no intentamos molestar. Si encontramos algún rebaño o pastor con sus animales, apagamos motor hasta que terminen de pasar.
No somos delincuentes, somos deportistas o simplemente, usuarios del monte, somos tus amigos, vecinos y compañeros de trabajo.
Jaime Rey Sotelo
Vocal de la junta directiva y director de comunicaciones.