Milagros Domínguez García
¡¡Déjenme soñar!!
Hace no mucho tiempo tuve la suerte de participar en la grabación de un video didáctico sobre el acoso escolar invitada por el Plan Director de la Guardia Civil de Pontevedra que, por no se que avatares de la vida, aún no ha visto la luz.
Hace ya algunos días la trágica noticia del suicidio de una menor me trajo a la memoria la experiencia de aquel maravilloso proyecto que se fraguó en las ansias y la ilusión desesperada de la Guardia Civil en hacer llegar el mensaje a nuestros jóvenes. En esta ocasión, buscando una forma clara y eficaz para trasladarlo ya que al fin y al cabo, una imagen vale más que mil palabras y todos sabemos ya que lo que no se ve, no existe.
El fallecimiento de esta niña me sumerge en un mar de reflexiones y no soy capaz de entender cuales pudieron haber sido las causas de que esta herramienta audiovisual no se hubiese puesto al alcance de todos los colegios a disposición de los alumnos, padres, y profesores porque lo cierto y a juzgar por tan dramáticos hechos nos hacen falta mil manos que se presten a colaborar y a trabajar para evitar futuras muertes, porque es así de cruento y con mucho pesar hemos de reconocer que habrá más.
Yo no me doy por vencida con facilidad y sigo apostando por la lucha y la suma de esfuerzos para erradicar de una vez por todas esta lacra social y no puedo evitar soñar, ya no solo con que ese video se pueda ver, sino también apoyarlo con otro cortometraje a través del cual trataría de remover la conciencia de todos y cada uno de los los actores sociales (administración, padres, profesores, alumnos, medios de comunicación) que de una u otra forma están implicados y/o relacionados con el acoso escolar en general y con este caso en particular.
Podrá parecer un guión de ciencia ficción, pero déjenme soñar, porque me enseñó alguien a quien me une un gran lazo de afecto que nunca se es demasiado mayor para hacerlo y que la ilusión es el medio con el que podremos llevar a cabo nuestros sueños.